Descubrimos este sitio cerca de San Pablo. El sitio bonito, aunque difícil de aparcar. La atención de 10. Pedimos ensaladilla de langostino (de 10) un sabor muy peculiar, y las croquetas que tenían una bechamel espectacular, buenísimas. El revuelto de bacalao también rico. Volveremos.
Reservamos una mesa grande y nos atendieron estupendamente.con los tiempos de cada comanda y en el salón fresquito. Si tienes intolerancia al gluten el jefe de cocina te aconseja y te hace todo estupendo.
Pedimos arroz para compartir muy bueno
Carta con tapas y platos originales y deliciosos, con una presentación cuidada, y con toda la sofisticación que proponen los locales más de moda del centro de la ciudad. Además el precio esté ajustado y la relación calidad-precio es altísima.
Tienen una zona de terraza bastante amplia, en una plaza donde suele dar el sol. Son muy amables.
Fuimos a comer un grupo de adultos con niños el que tenga espacio para que ellos jueguen es un punto a favor, la atención es muy amable pero fue muy lenta y algo desorganizados con las comandas, pero es verdad que había mucha gente. La comida en general está muy rica, bien hecha y presentada y la relación cantidad/calidad/precio está bien. Nos gustó mucho el wok, el tataki y la ensaladilla, las papas bravas estaban buenas y la hamburguesa no la probé pero tenia muy buena pinta. Los postres también estuvieron ricos. Volveremos a probar otros platos sin duda.
Comida novedosa y rica, rica. Y el servicio muy atento y amable. No nos cupo la torrija, así que habrá que volver.
Me gusta ir a este sitio y me parece sin lugar a dudas el mejor restaurante de San Pablo. Se agradece que haya negocios que apuesten por la calidad y la buena gastronomía, saliendo un poco del concepto del bar de toda la vida. Trato de los camareros estupendo originalidad en los platos y buena presentación sin lugar a duda. Como punto a favor el poder reservar mesa a través de Google. Y dispone de precios muy buenos. Tres personas con doble ronda de bebidas un plato y cinco tapas un total de cuarenta y tres euros. Recomendado 100%
Fui de casualidad y me encantó, la carta tiene cosas muy variadas y cada cual más rica. Pedimos unas croquetas de pringa, queso frito, gyozas y risotto de carrilla. Estaba todo buenisimo, el risotto se deshace en la boca me encantó. De postre pedimos el ferrero rocher y es una pasada, esta para repetir 3 veces. El personal muy atento y amable, nos atendió una chica muy agradable. Y el chico de la barra nos recomendó un vino acorde a nuestro gusto. Repetiré seguro.
Un sitio estupendo para salir a cenar. Lo probamos, la experiencia fue muy buena y volvimos a repetir. La carta es variada y muy original, además las raciones son grandes, sobre todo considerando los precios, que son muy asequibles. El trato inmejorable, con Paco siempre atento a que todo esté a punto. La verdad es que da gusto tener sitios de esta calidad en los barrios, demuestra que también se puede ir a comer bien fuera del centro.
Cenamos en éste establecimiento en familia y nos gustó mucho.
Probamos el brioche con tartar de atún y dados de aguacate y estaba muy rico, el gofre meloso también estaba muy bueno, el serranito estaba bueno también, un concepto diferente, el pan bao bueno también, el sandwich japonés también gustó y la hamburguesa tambien buena pero los solomillos estaban muy sosos y secos no sabían a nada.
El servicio bastante bueno y amable aunque se quejaban bastante de clientes borrachos que había en la terraza.
Los postres una maravilla, me encantó el ferrero.
Volveré a repetir.
Comida muy rica y sabrosa, tapas típicas, con sabores muy buenos. La atención muy buena y el sitio es muy bonito y agradable. Tiene una terraza muy amplia que en verano es una delicia. En mi caso, fui con los compañeros de trabajo para una cena de empresa y nos trataron fenomenal. Comimos genial. ✨👌🏻 Los postres de lo mejorcito !!
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