Opiniones Marina Oyster Hotel

La estancia fue bien , quitando algunos detalles, pero el problema fue la gestión con las habitaciones, fue todo una odisea que me dieran las habitaciones como había solicitado y me costó mucho , esto fue un problema porque al llegar delante de mis amigos a los que le iba a dar la sorpresa tuve que gestionar de nuevo las habitaciones que llevaban semanas reservadas y aún así estaban mal. Me decepcionó mucho. A veces no es necesario tanta amabilidad sino más empatia y responsabilidad. En mi estancia he de destacar que es la segunda vez y está ha sido muy ruidosos, los empleados de la furgoneta y coches a las 1 de la madrugada debieron acabar y se pusieron de rollo en el patio, se escucha todo en las habitaciones y cuando digo todo es todo. Las vecinos de muchas habitaciones fueron muy muy ruidosos también y nadie les llamó la atención. Asique como en la anterior estancia me quedé muy feliz en esta no tanto. Una pena

Siempre que nos es posible elegimos este hotel para una escapada. Nunca decepciona. Esta vez nos alojamos en unas fechas en las que el hotel estaba lleno y sin embargo no se apreciaba saturación en las instalaciones comunes. Nos ha acompañado un tiempo de verano increíble en el mes de octubre que nos permitió disfrutar también de las instalaciones exteriores. Espero que podamos volver pronto.

Llegamos con una habitacion estandar y nos pusieron en una suite. Se agradecen de vez en cuando esos detalles. Por lo que nos explicaron en recepcion suelen hacerlo segun la disponibilidad del hotel. De verdad que un detallazo. La habitacion espectacular. Grande, comoda, limpia. El personal de recepcion muy amable y profesional. Respecto al spa todo muy correcto. Mejor ir a unas horas que a otras si quieres trankilidad hay horas en las k hay mas gente k otras. El desayuno muy variado y rico y la gente de la cafeteria muy agradable y siempre pendiente de todo. Por ponerle un pero.. si ke se echa de menos en el edificio 2 una cafeteria abierta para tomar algo a la tarde o a la noche o incluso cenar sin tener k desplazarte al 1. Entendemos k es una epoca baja y es normal k se concentre todo en una cafeteria. Si que quiero destacar que si ke me parecio bastante asequible el minibar. Con precios normales. Que siempre los minibares tienen mala fama. Pero este a mi me sorprendio. Evidentemente una experiencia para repetir. Gracias a todo el personal por vuestro trabajo.

Estuvimos dos noches con el pack sabores y mimos (2017). El hotel muy bonito, la gente del hotel super agradable. El primer día elegimos de tratamiento el peeling y envoltura de chocolate y la verdad que fue lo único que no nos gusto en relación a otros sitios porque el peeling es de 1min contado te frotan con un guante malamente y la envoltura deja mucho que desear, (untan mejor la nocilla en una barra de pan que el chocolate en la persona).El segundo día elegimos el masaje vichy y el masaje completo y tenemos que decir que fue genial, los chicos que nos tocaron super agradables y profesionales, muy buenos masajistas y con el tiempo que te dicen no como el anterior que no lo cumplen. El desayuno buffet muy bien y variado, zumo Natural. El problema es que debería haber mas sitios porque llegabas y te encontrabas con que no había mesas libres. El resort, esta genial, el tema de que te dejen el smart o te lleven. La habitación muy limpia, los detalles que te dejan como el agua ,geles y todo lo demás un puntazo , las camas cómodas, tienes almohadas donde elegir, tienen nesspreso y comida que si quieres consumir lo pagas, pero lo veo bien. Deberían limpiar mas las ventanas y que las tv se conectasen mas fácilmente a internet porque nosotras no fuimos capaces. Las comidas aceptables.

Fuimos en Marzo y volvimos ahora en Octubre, como esperábamos todo perfecto, habitación muy agradable, spa muy acogedor y muy cuidado y el personal maravilloso tanto en el hotel como en el restaurante, sin dudarlo el mejor sitio para relajarse y descansar unos días, deseando volver. Muy recomendable.

Estancia de dos noches para dos adultos en régimen de desayuno. En cuanto al check-in, deberían especificar en la reserva a cuál de los dos edificios dirigirse. Aún así, la distancia entre ambos es de 4 minutos a pie. Nuestra habitación era una Family Suite, es decir, baño/zona cama/zona salón/cocina. Todo perfectamente limpio y ordenado. En el armario había toallas, albornoces y chanclas para el acceso al SPA. También un par de gorros de paja, de pago. También, junto al mini bar, una máquina de café con cápsulas (de 1€ cada una). Todo de pago expecto el agua (2 botellas). Hay tv tanto en la cama como en la salita. La cocina, bastante escasa en cuanto a cubertería y útiles de cocina. Hay dos fogones, una nevera pequeña, tostadora, exprimidor y microondas. Una olla. No hay sartenes ni útiles de cocina como espátula, cucharón, etc. El microondas debería tener “modo horno” para ser más completo. Un detalle que no nos agradó es encontrarnos “objetos de pago” en la habitación. Si el huésped quiere comprar una figurita, unos sombreros, o lo que sea, ya lo hará en el lugar oportuno. La habitación no creo que sea ese lugar. En cuanto al SPA, ambas piscinas perfectas. Una es más grande pero más ruidosa, en el edificio II. La otra es más pequeña pero más tranquila, en el edificio I. Ambas constan de jacuzzi interior y exterior, así como sauna y baño turco. No es obligatorio acceder con gorro de piscina. A la vez que el SPA, también hay piscina de “baño libre”. No estaría de más aumentar un poco la temperatura del agua, está caliente “pero no mucho”. Por otro lado, deberían ofrecer un servicio más cómodo para cambiar los albornoces y toallas puesto que, si accedes en la mañana y en la tarde, reutilizarlo se hace imposible porque está todo empapado. Tuvimos que esperar cerca de 2 horas para que nos hicieran el cambio, estando ya en el SPA. Tampoco se nos dio mucha facilidad cuando lo pedimos. El servicio de limpieza de las habitaciones, perfecto. Especial mención para la encargada de nuestra planta no solo por la perfecta limpieza sino por el trato tan cercano. Nos hizo sentir en casa. El personal del hotel es muy atento. Tienen un coche de préstamo para que puedas moverte entre el edificio I y II con facilidad. Sin coste. Aunque están muy cerca, no están en el mismo recinto. También tienen servicio de transfer en furgoneta cada par de horas. Incluso también para bajar al pueblo. El desayuno también es muy completo y variado. Rellenan rápidamente lo que se va acaban y está todo muy rico. Lo que no es tan positivo es que en caso de querer comer o cenar, tengas que ir si o si al edificio I. El restaurante del edificio II debería funcionar al menos como cafetería en turno de comida y cena. Además del SPA, hay muchos puntos dignos de visitar. En huerto, en gallinero, el domo, o los salones que cuenta con pinpon, videoconsolas, dardos, futbolín, billar y poker. La decoración de ambos edificios es exquisita. Por último, que haya que pagar por dejar el coche en el hotel me parece incomprensible. 5€ si lo dejas en el exterior y 9€ si lo dejas en el garaje. Hemos leído comentarios sobre ruido de las persianas eléctricas al usarse: en nuestra habitación todo correcto. También gente hablando del ruido del SPA: es lógico el ruido en una piscina con chiquillos correteando y disfrutando del agua. Pero, para quien no esté cómodo, el hotel dispone de otro SPA mucho más tranquilo. Repetiremos sin duda alguna la experiencia porque es un sitio muy cómodo, muy completo y muy tranquilo; pero hay detalles que pueden mejorarse.