Muy buen sitio. Carta corta pero suficiente para saber que estás en un gran restaurante. El servicio es impecable pero a la vez cercano. Precios a la altura de la calidad de la comida. La ensalada muy buena, las croquetas de 10. Costilla deshuesada perfecta y salmón exquisito. El brownie espectacular. Para volver.
Local pintoresco y muy bien decorado. La atención y el servicio fueron muy buenos. Es un local pequeño, mejor hacer RESERVA.
Variedad en la carta y calidad de platos. Recomendaciones: la Morcilla de untar y la Tarta de Almendras.
Respecto a los precios se nos hizo bastante más caro que una moneda. Es verdad que la relación calidad-precio es buena (debe ser la prioridad), pero en cuanto a cantidad-precio es poca para lo que vale cada plato (depende de lo que cada comensal busque). Lo que sí se hizo bastante caro fue la bebida, una caña 3€.
Sin duda repetiría experiencia para probar otros platos por varios motivos como el ambiente, la atención y el producto.
Fuimos por casualidad y fue un acierto. Tienes menú del día por 18€ platos combinados entre 8-12€ ensaladas 10-12€. Los platos son grandes. El servicio muy rápido. Y buen producto. Lo único que no me gusto fue el café. Pero de la zona los mejores
Un lugar acogedor situado en una casona antigua en el centro del pueblo. Excelente servicio, desde que entras por la puerta se nota la profesionalidad. Comida rica, de calidad, bien presentada y con opciones sin gluten.
Tiene mesas en la planta baja y arriba. Estuvimos muy a gusto junto al balcón. ¡Repetiremos!
Espacio muy acogedor y tranquilo, nos acomodaron en su mejor mesa, junto a un coqueto balcón en el que pudimos disfrutar tomando un aperitivo.
Cocina casera con género de primera calidad y sin gluten.
Nunca había probado "yogurt" de albahaca, pura delicia para terminar una estupenda comida ;-)
La mejor ventresca de bonito que he comido, la he podido probar en este restaurante con distinción Solete de la Guía Repsol. A pesar de haber pasado unos meses, todavía me acuerdo, perfectamente, lo sabrosa y delicada que era la textura del pescado. Sólo por eso, mereció la pena visitarlo.
La mezcla de tradición y modernidad es lo que, a mi parecer, ofrece este restaurante, centrándose en productos frescos del mar con una decoración rural, muy acorde al pueblo de Santillana del Mar. Recomiendo visitarlo de día y reservar en la primera planta donde la luz del sol produce un ambiente muy cálido y agradable. Perfecto para comidas en pareja o familia (grupos reducidos).
Angeles Gonzalez Grandal
+5
Es la segunda vez que vamos a este restaurante ( hemos vuelto a Santillana sólo para poder cenar ahí de tanto que nos gustó el año pasado). El trato de todo el personal es EXCELENTE. La comida tiene una calidad estupenda y una presentación perfecta. Todo está riquísimo. Todos los detalles están cuidados al máximo. Un diez en todos los sentidos.
Totalmente recomendable! Comida 100% servicio 100% y ambiente 100%. Hemos pedido alcachofas almendradas con jamón y setas para compartir. Estaban riquísimas, aunque prefiero flores de alcachofas. Además, hemos pedido salmón marinado al eneldo al limón y os tengo que decir .. enhorabuena con la presentación! Y de sabor muy rico. Para poner una pega .. un poco caro el plato de salmón .. yo lo pondría a 14€. Finalmente, el risotto .. pff muy bueno ! Gracias por el servicio Ángela
Marina Martinez Benages
+4
Un sitio muy acogedor. La comida espectacular, recomiendo reservar porque es pequeñito. El tartar de atún estaba espectacular. La camarera fue súper atenta y amable.
Disfrutamos de una comida memorable en el pasaje de los nobles! Una antigua casona con mucho encanto y un servicio para quitarse el Sombrero. Comimos dos adultos en la planta superior al lado de balcón con vistas a la preciosa calle. Pedimos el risotto
(No os lo podéis perder!) y unos pimientos verdes. De segundo bacalao y costillas deshuesadas. Una maravilla! Para terminar un brownie de chocolate riquísimo. También mantuvimos una agradable charla con la camarera que es una profesional simpatiquísima. Os lo recomiendo muchísimo! Como anotación decir que es un sitio muy pequeño y con un ambiente muy tranquilo, nada apropiado para ir con niños. En caso que viajeis con la familia os recomiendo otro tipo de restaurante. Espero poder volver algún día. Lo
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