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Restaurante Marucho - Santander - Álbum de fotos
EXCELENTE. Producto exquisito y de primera, fresco, te enseñan las piezas previa cocina. Pedimos rabas que no resultaron para nada aceitosas. Las mayores cigalas que hemos visto en nuestra vida y un centollo de 2kg. Todo maravilloso y servicio muy atento y agradable. Un obligatorio si vienes a Santa
Este sitio tiene la particularidad de ser muy pequeño y no admitir reservas por lo que, o estás a primera hora, o te tienes que apuntar a la lista de espera para entrar según van terminando las mesas que han llegado antes que tú.
Eso sí, este modelo que puede parecer algo "antipático" no tiene nada
Parada obligatoria en Santander. 10/10. Producto fresquísimo, de buena calidad y riquísimo. Recomendaría casi toda la carta porque está todo increíble.
No reservan, pero merece la pena esperar a que te den mesa. Es muy pequeñito y acogedor.
Si vienes a Santander tienes que venir aquí. Es una auténtica maravilla. Tanto el producto como el servicio, ¡de absoluto 10! Volveré sin dudarlo.
Restaurante de comida tradicional, con variedad de mariscos y pescados. Pedimos rabas, rodaballo y almejas, todo muy rico, aunque precio algo elevado. El servicio atento y amable, aunque se nota que están deseosos de que liberes la mesa
El restaurante es típico de Santander que una carta muy amplia de marisco y pescado, ofrecen buenos vinos de toda españa y la comida está muy rica conservando la calidad,
El trato del personal es inmejorable
Se encuentra en la calle de Tetuan cerca del centro de Santander
Muy rico !
Parada obligada si vas a Santander y tienes suerte de que haya sitio.
La comida exquisita.
El pudding de cabracho el mejor que haya probado sin duda.
Las navajas, exquisitas así como las ostras, súper frescas.
Buen precio y buena calidad del producto.
Los postres caseros buenísimos.
Una buena marisquería, producto fresco y de muy buena calidad, quedamos encantados, además personal muy amable y atento. No le doy 5 estrellas porque nos cobraron el pan sin pedirlo, incluso nos pusieron una ración de pan para un niño de 3 años, nos pareció injusto.
Estamos es un curioso restaurante, muy pequeño, con las mesas muy juntas, pero con una comida escepcional. Buenas raciones en cantidad y calidad. Los camareros son muy atentos y funciona todo como un reloj. Puedes reservar pero eso no significa que tengas mesa a la hora que has solicitado a esa hora
Es un lugar encantador y aunque es muy pequeño y no admiten reservas , si esperas un poco siempre lograrás una mesa !
Comida de mar ya sea pescados o mariscos todo es delicioso !
Un restaurante tradicional de Santander !
Vale la pena de una vuelta para comer y beber rico !
Platos bien servidos a p
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