Buen sitio de almuerzos, y comidas. Con parrilla, y una carpa exterior. Los caracoles son algo caros, pero el resto de precios están bien. Recomendable.
Pues andaba por La Roca Village y a eso de las 13:15 vi el panorama para comer allí y se me ocurrió buscar el Google algo cerca , por diooos ESPECTACULAR, menudos caracoles, carnes i ELS ROSSINYOLS !!!! No os lo perdáis vale pena ir os lo garantizo !!!
Comida de sabado, no hay menu !!
Encuentro que los primeros platos son caros respecto a los segundos, la comida buena y bien presentada, ( 45 eu.aprox por persona )
El personal de servicio ,agradable, un comedor lleno y algo ruidoso .
Intentaremos volver !!
Todo muy bien la comida el servicio precio correcto.
Después de Covid, casi dos años, vengo a comer otra vez y ha sido todo perfecto, como hemos llegado tarde, solo hay menú, 14.50 euros por persona, dos platos con postre, bebidas aparte, lástima no queda la paella, he pedido una sopa de abuela, riquísima, y segundo es pato, súper, 100% recomendable, como no, hemos pedido cargols, son tan bueno como siempre, el postre es trufas de chocolate, también muy rico.
Servicios muy agradables, y no hay mucha gente, los clientes son de locales, no hay muchos ruidos, el ambiente es tranquilo, de mi gusto.
Ganas de repetir 🥰🥰🥰
Se come muy bien. Los caracoles buenísimos. Bastante ruido de platos y demás, en el salon del bar. Supongo que en el otro comedor es menos ruidoso. Pero por un día, puede pasar. No es barato, aunque para mi, si disfrutas lo que comes y tienes buen servicio, lo pagas a gusto. Lo recomiendo, se come muy bien.
Situado en el pequeño y tranquilo pueblo de Santa Agnés de Malanyanes, es un restaurante que ofrece un menú diario (desconozco si también lo ofrece los fines de semana) por 15,50€
Sólo con ver su nombre podemos adivinar que los caracoles forman parte de su carta y así es. Existe la posibilidad de añadirlos a su menú o, sencillamente, pedirlos aparte.
Visité el lugar con unos amigos y pedimos una ración de 40 caracoles para compartir (16,50€) mientras llegaban los platos del menú que en mi caso fueron pastel de calabacin y churrasco. Una tarta de Santiago bastante jugosa puso el punto dulce al final de la comida.
Junto al restaurante hay un amplio amplio parking propio.
A un pequeño paseo se puede contemplar la iglesia del pueblo, obra románica bien conservada.
Un lugar agradable con un servicio muy atento. Menú de calidad y buenos postres. Sorprendido de los platos semanales que ofrecen. Bonito restaurante en el que el menú ninca falla.
Hemos comido bien en general. Recomiendo que preguntéis por el precio de los platos que ofrecen fuera de carta para que no os llevéis ninguna sorpresa cuando os traigan la cuenta.
Comida muy buena,las camareras muy simpáticas y atentas,para repetir.
Comida sabrosa, servicio normal, un pelín lento y ambiente agradable. Precio carta creo un poco elevado.
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