Opiniones Lido

Camareros MUY amables, se nota que mes gusta mucho su trabajo y disfrutan de ello. Comida de buena calidad y ambiente mas de lo mismo. Cada verano que estamos por ahí vamos si o si!

HACE 3 AÑOS: Restaurante bien ubicado, con aparcamiento gratuito cercano. Decoración poco sofisticada, tipo cafeteria, que desmerece su buena cocina. Menú diario de varios primeros, segundos y postres, bien cocinados y abundantes. Buena relación precio-calidad. Recomendable, volveremos. ACTUALIZACIÓN A 13-1-24: Hace sobre un año y medio que lo cogió la actual dirección, dándole un giro más hacia bar, hamburgueseria, bocateria, que puramente restaurante. El local está actualizado con mobiliario y ambiente a propiado a esta nueva orientación. Éstá limpio y agradable, aunque un tanto ruidoso cuando se llena la barra de personas. La verdad es que al menos ayer, resultó un poco molesto estar sentado en una mesa a un metro de personas de pie y sentadas en la barra. Creo que este modelo deberia revisarse ya que además afecto en la diligéncia para servir las mesas que ya estábamos en plena comida, por ejemplo, con mucha dilación entre el segundo plato y los postres, para los cuales tuvimos que llamar al camarero. En ese momento era necesaria una segunda persona, que estaba al llegar, pero que dejamos de ver a posteriori (15:30 h) Así y todo, el servicio, a cargo del que nos pareció sea el nuevo propietario, fué atento, con muchas ganas de servir y hacerlo bien y bastante profesional. Queríamos comer una paella, pero ahora hay que pedirlas con antelación porqué ya no estan en la carta. Comimos una ensalada mixta (grande, quizás excesiva y todo para una sóla persona, pero el camareo ya nos advirtió que era ideal para compartir) con mezclum, zanahoria, pimiento, sin cebolla y con dos rodajas cortadas a mandolina de tomate; callos muy buenos, un poco picantes, en cazuela de barro lo que ayuda a mantenerlos bien calientes y así la grasa mantenga su punto exacto de solidez, quizás faltos de un acompañamiento y un pelin escasos; carrillera de cerdo, buena quizás falta de 1/2 de cocción para que se desprendiera la carne facilmente, con unas patatas fritas de guarnición que estaban muy bien fritas. De postres pastel de queso, hecho en casa, muy correcto. Nos salió por 25 eur/cabeza, con café y bebidas (refrescos). Juzagamos el precio correcto, ni barato ni caro. A unos 150 metros hay un aparcamiento público y gratuito, al que se accede por una calle justo al inicio del puente sobre el Fluvià. El local és accesible y cuenta con mesas en la calle. Acepotan tarjetas de crédito. Por lo explicado no puedo esta vez puntuarlo mejor, pero la voluntat de agradar y la comida, son suficientes para desear volver, aunque sea para ver si esos aspectos que, a mi entender, desmerecieron este día, van superándose.

Nos paramos a hacer unas cervezas y el camarero le preguntamos que servezas tenía. Y nos dijo, entrar y las veis. Al principio nos pareció algo desagradable pero después nos dimos cuenta que fue una broma, no muy entendida, por nuestra parte. Igual es un pueblo que no hay mucho que hacer. Todo cerrado y nada de ambiente.

De paso nos sentamos aquí y que RICO !!!! Comimos dos Platos combinados riquísimos ! Te ponen con la bebida un poquito de cóctel de frutos secos y pan, claro sin coste, pocos sitios lo hacen . La atención muy buena… llegamos tipo de 16 y nos sirvieron de comer igual sin problema El Baileys en un vaso con bastante cantidad . Se extrañan lugares así, clásicos y de calidad . Muchas gracias !

Muy atentos y agradables ! Volvere otra vez