Es un Burger King estándar de la cadena en cuanto a limpieda y decoración, nada que destacar. Está situado a las afueras de Salamanca lo cual está bien porque no se llena tanto, pero el problema es que a la mínima que hay algo de clientela tardan bastante en servir. Es cierto que no se les suele olvidar nada en los pedidos, lo cual es de agradecer bastante.
En cuanto a la calidad de la comida, son bastante irregulares, suelo ir cada 2 semanas y hay veces que (con perdón a la comida) la hamburguesa es una suela de zapato insípida que no se puede comer ni bañada en salsa y me duele el riñón de forma incomensurable por haber pagado por tremenda bazofia y otras que está al nivel de calidad esperado por una cadena de estas características.
Le pongo 4 estrellas porque el resto de BKs no son mucho mejores y porque los trabajadores son majos.
Fui a cambiar el aceite al taller de la lado, y mientras me hacían el servicio, fui a merendar al restaurante, y decir que me sorprendió las mejoras en cuanto al año pasado.
La rapidez, la limpieza y el servicio, impecable.
Mi experiencia fue muy buena comida rápida y había una persona limpiando la sala muy frecuentemente nos atendió un chico de nombre raro yadian creo que era y fue simpático y amable volvería a repetir
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