Un sitio espectacular para el aperitivo, con unos cuencos de patatas fritas y olivas, acompañados de unos vermús y unos vinos blancos albariño. Y de remate, un pincho de fideuá espectacular. Sentados en el sofá tan tranquilos disfrutando de las vistas de la playa de Raxó. Espectacular. Trato del servicio muy rápido y amable. Muy recomendable.
¡LA MEJOR OFERTA GASTRONÓMICA Y DE OCIO DE RAXÓ HOY EN DÍA!
Llevamos tiempo queriendo escribir esta opinión, que esperamos pueda ayudar a otros viajeros a descubrir esta gran familia que es Amura. Como cada año deseamos que lleguen las vacaciones para olvidarnos de Madrid por un tiempo y desembarcar en Raxó, mientras soñamos días previos con disfrutar de su tradicional y exquisita “Tosta de pulpo con tetilla” a nuestra llegada.
Se trata de un lugar ubicado en primera línea de playa, que combina a la perfección calidad, buena atención, y una estética y decoración moderna, cuidando cada detalle.
En Amura puedes disfrutar desde un rico y completo desayuno con vistas al mar, pasando por pinchos a media mañana, comer, cenar, y con una gran oferta de batidos, cocktails, chocolates, infusiones y un largo etc, para terminar el día. A última hora se crea un ambiente tenue y amable, con la mejor música del momento que invita a cantar y disfrutar.
Además, durante los meses de verano los dueños, Marta y Ángel, se preocupan por potenciar el disfrute de todos, niños y adultos, contratando, a menudo, espectáculos de magia, grupos de música y diferentes shows, bingos solidarios, que amenizan y animan las noches de verano.
Por último, el equipo de trabajadores desprende un trato cercano, rápido y muy muy amable, a pesar de la carga de trabajo y momentos de estrés.
Si teníais alguna duda, no lo penséis más, Amura Raxó no decepciona.
Pd: yo este año he apostado muchas noches por el chocolate blanco caliente con piñones y limón, ¡DELICIOSO!
lorena gaillardou gregorio
+5
Pasar por Raxó es parar a tomarse algo en el Amura. Un sitio con unas vistas impresionantes a pie de playa. Con la maravillosa atención de Marta y Ángel. Con algunos cambios en la carta, es un sitio para tapeo, cervecita en su preciosa terraza o unas copas al caer la tarde. Un sitio para ir y volver y volver. Muy recomendable
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