El Restaurante Asador la Antigua es excelente. De viaje a Galicia decidimos parar a comer por Burgos. El Asador la Antigua es la mejor opción para no tener que entrar a la ciudad. La circunvalación te deja al lado.
Un restaurante de ambiente familiar, rústico y bien cuidado y limpio. El servicio ex
Estábamos por la zona, y buscábamos un sitio para comer. Dimos con este lugar en el que no habíamos estado nunca.
La verdad, restaurante a tener en cuenta en el que la comida está muy buena, y con una excelente selección de postres caseros.
En esta ocasión, no tomamos las especialidades del asador,
Restaurante con trato familiar, el personal es atento y encantador. La comida muy buena ,destacaría por encima de todo la sopa castellana (la mejor que he comida nunca) el lechazo (al horno de leña)y el pulpo a la plancha.Tienen pan sin gluten. Habré estado unas 5 veces y habrá seguro una sexta. Nun
Nos atendió Merche y fenomenal, muy amable, atenta, cariñosa. Recomendado al 100, nos dirigimos a Bilbao y paramos a comer y la experiencia mejor imposible
Un sitio maravilloso para ir a comer, el trato excelente. El chuletón espectacular
Excelente Restaurante en el bonito pueblo de Quintanadueñas. Hemos comido menú del día y todo ha estado riquísimo. Tienen una gran carta de Asados y platos con muy buena pinta. Comida casera y de muy buena calidad. Relación calidad precio inmejorable. El restaurante es muy bonito y esta muy limpio.
¡¡ESPECTACULAR TRATO Y PRODUCTO!!
Comimos en este maravilloso restaurante en la vuelta de nuestro viaje Bilbao-Madrid, la verdad es que no pudimos escoger mejor.
Pedimos una ensalada mixta acompañando a un chuletón de Buey a la brasa, sin palabras. De los mejores que he probado en mucho tiempo, cali
Comida fabulosa, el lechazo de calidad y en su punto, riquísimo. Pedimos también entrantes: pimientos rellenos, mollejas, y morcilla...todo riquísimo, al igual q los postres. Acompañado de buen vino, café y chupitos. Precio medio unos 45 €, merece la pena. El trato, como siempre, de diez.
Es un magnífico sitio donde degustar cordero u otros asados es un acierto, pero en concreto el lechazo es de sólo una semana anterior a cuando lo tienes en la mesa. La camarera que nos tocó, muy atenta y maja, aunque parece vasca, nos comentó que no lo era entre risas.... Los postres, tienen pocos,
Una maravilla de trato y un magnífico sabor en todos y cada uno de los platos y postres tomados.
Con ganas de más y más sabiendo cómo hemos disfrutado en familia.
Calidad/precio a la altura de la carta y el trato.
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