Cerca de nuestro alojamiento estaba este local.
Hubo varios días que estuvieron cerrados, (posiblemente de vacaciones/descanso).
Una mañana al ir de camino a otra cafetería para desayunar lo vimos abierto y por cercanía, decidimos parar en este local.
Tienen sólo terraza en zona de acera y exterior.
En el interior del local sólo tienen la barra, baños y se entiende zona de cocina aunque no se vea.
En el desayuno, tomamos dos cafés y un té.
Un gofre, un croasant y una tostada de pan con mantequilla y mermelada.
Todo por unos 14€.
Decidimos ir a comer ese mismo día.
No tuvieron problema en reservarnos mesa a la vuelta de la playa a las 15h para 3 personas.
De la carta, pedimos:
- Gazpacho
-Salmorejo
-Ensalada de queso de cabra
-Los huevos de mi madre
- Puntillitas
1 tinto de verano, una botella de agua y una cerveza.
Todo por unos 55€ aproximadamente.
A niveles generales 8/10.
Tanto por los desayunos y la comida.
Personal amble, servicial y cercano.
Roberto Hernandez Garcia
+4
En su justa medida, tomate aliñao rico, sardinas fuera de carta muy buenas, la fritura de pescado un pelin salada, pero aceptable. El personal se mueve, cosa q he leído en otras reseñas en las q se pone todo lo contrario
Muy buena tostada de jamón para desayunar aunque es cara (unos 4,5€). De todas formas abundante cantidad y muy buena. Un pan hubo que rasparlo que venía quemado.
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