Gran lugar para comer, con vistas a la playa y ambiente de chiringuito de los de antes.
La comida muy buena y variedad, a escoger entre carne y pescados y diferentes tapas.
El servicio muy amable y simpático.
No aceptan reservas y van por orden de llegada, nosotros a las 13h tuvimos que esperar un rato para una mesa de 10.
Sin duda repetiremos.
Sitio perfecto para comer si vas a Port Lligat y visitar la casa museo de Salvador Dali. Frente a la cala y con vistas al mar. Buena comida, servicio muy agradable y rápido, y precios razonables. Recomendable 100%.
Segunda vez en este Bar-Restaurante de Playa y siempre con las mejores sensaciones. Al ladito de la cala y con una brisa marina encantadora.No te pierdas ninguno de sus platos. Esta vez fue “picoteo”, como se muestra en la foto; primera calidad. Su plato de sardinas es increíble y, aunque nos hemos quedado con las ganas, la próxima vez “caerán” las vieiras con jamón: no veáis que pintaza.El personal: maravilloso . Recomendado 100% y con ganas de volver.
Sitio con una ubicación inmejorable. Personal profesional y muy amable. Comida muy buena. A destacar las navajas y vieiras con jamón
Jaime Asensio de la Riva
+5
Chiringuito al lado de la playa con comida de excelente calidad. Las sardinas frescas y muy bien preparadas. El personal atento y simpático. Muy recomendable. Gran relación calidad-precio
Nos ha encantado! Fuimos los 5 de la familia. Buena comida y trato exquisito, mi hijo no se comió dos navajas y se dieron cuenta y le trajeron dos mas x si no las había encontrado buenas! No se puede reservat pero solo esperamos 5 min a las 1430. Sardinas y gambas buenísimas, buen vino (Mar Endins)Lo recomiendo!
Sardinas, mejillones y calamares a la andaluza. Postre tarta de queso y taps de Cadaqués. Muy buena atención, localización inmejorable y precios muy razonables. Las cantidades dentro de lo normal. Muy rico todo.
Por proximidad, comimos al llegar. En primera línea de playa. No se admiten reservas, atienden por orden de llegada
Fuimos a comer justo antes de hacer una ruta en kayak y nos encantó. Tiene un montón de empleados y no paran ni un minuto. Aún así fueron todos super amables con nosotros. La comida deliciosa. Pedimos sepia, lubina y gambas, todo para compartir y estaba todo muy fresco. Se notaba que era buen género. Hay un parking amplio al lado por 5€ puedes dejar el coche todo el día. También esta muy muy cerca la casa museo de Dalí.
Un lugar de los que se echa de menos.
Gran servicio, buena comida y buenas vistas.
Volveremos, sin duda!
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