Espectacular el servicio, el local y como no el fantástico lechazo.
Muy recomendable el pavo trufado y las morcillas.
This was an amazing restaurant! I had the sopa Castillana (garlic soup) and the chuletillas of lamb! So delicious!! The ambiance is amazing. Definitely walk around it is an interesting building.
Miguel Fernandez Rivadeneira
+5
Un lugar en un entorno privilegiado. El lechazo un manjar exquisito y el trato del personal de sombrerazo.
Hemos estado el viernes y repetimos el sábado. Trato excelente, muy profesional. Amabilidad y la comida fantástica!! Totalmente recomendable. Repetiremos!! Muchas gracias!!
Un sitio para recomendar a cualquiera que quiera disfrutar de una excelente cocina castellana con un servicio de primera. Para repetir, sin duda!!
Patricia Benito Martinez
+5
Un restaurante increíble donde degustar un buen lechazo con un vino de primera y una atención personalizada al detalle!!
After walking vineyards all day, a welcome respite, with an accommodating staff, delicious lamb, beautiful setting stream-side
Buenísimo!!! Nos encantó, el lechazo impresionante, y los postres caseros�!!
Ruth Hermoso Villatoro
+5
Todo riquísimo y un ambiente estupendo
Maria Rodriguez Molinos
+5
Comida de calidad y profesionalidad y amabilidad de personal inmejorable. Un sitio precioso para comer bien!!
Sonia Chiarelli Constantino
+5
Perfeito... lindo.. aconchegante....atendimento... deliciaaa...amei ��
I hate to use the word amazing to describe food. But this place would fit the description. The roasted lechazo was delicious the rabbit stew was also delicious. The restaurant setting was also classically charming near a creek. I would eat here again.
After 2 weeks and hundreds of Tapas options in Barcelona, Madrid and Salamanca, this was the first meal that I actually felt I was truly eating in Espana. With no American tourists in sight, this restaurant is built in an old Mill along a quiet river in the Ribera de Duero wine region. It is rustic by nature and offers lamb, beef, fish ..you name it. They were very friendly and seemingly every Spanish wine visitor in-town during our 2 day stay in Penafiel ended up at this restaurant.
Hemos venido a comer por las reseñas y hemos acertado.
El edificio es precioso, antiguo molino lleno de historia y decorado con gusto.
La atención es muy buena, y el servicio rápido.
La comida buena, con raciones y medias raciones para poder probar varias cosas.
El lechazo muy bueno.
Faltaría alguna opción para niños, por lo demás, genial.
Tiene un espacio exterior junto al río que invita a tomar allí el café y pasar la tarde de tertulia .
Recomendable.
Hemos ido sin reserva porque nos fue imposible llamar, saltaba el contestador y no pudimos escribir watssap. Pero como siempre, una atención excelente. Nos buscaron hueco y pudimos disfrutar un año más de la calidad en cocina.
Somos de Coruña, y cada vez que pasamos, no podemos ir a otro sitio. Excelente.
Realmente un lugar con encanto. Tiene una carta magnífica donde ínsita a probar cada uno de sus platos! Comida casera, rica y de calidad. Un pelín caro pero merece la pena. Lo recomiendo!
Según entras te llega directo el olor a lechazo asado, por lo que el plato a pedir, está ya elegido. También probamos arroz con conejo y setas de cardo, todo buenísimo, también los postres. Decoración a modo museo etnográfico, muy rustico, pero agradable. Trato del personal excelente. Precios acorde a lo que te sirves, sólo me pareció excesivamente caro el pan y el agua. El vino de la casa está muy bueno y a buen precio.
José Antonio Beltrán Castro
+5
El Molino de los Palacios.
Buena experiencia, de entrada el servicio muy atento, aconsejando platos y no pedir en exceso, demostrando profesión.
La comida excelente, muy buenos productos y bien cocinado. Raciones generosas. Lechazo muy bien cocinado, plato estrella del restaurante.
Ambiente muy peculiar, estamos en un molino y la decoración refuerza el ambiente .
De lo mejor el trato que dispensan las personas que te atienden.
Llegamos por casualidad y aún no teniendo reserva fueron muy amables de hacernos un hueco para comer.
Sitio con encanto, personal atento y comida de 10. Postres caseros, como recomendación la tarta de queso buenísima.
![5]( "Recensione")
Venimos recomendados por unos amigos de Peñafiel que nos dicen que es el mejor sitio donde comer lechazo y sin duda, ha sido un acierto absoluto. Me han impresionado las mollejas de lechazo. Buenísimas!!!!! Y pedimos un cuarto de lechazo de la parte superior y madre míaaaaaaaaaaaaaa! Tierno por dentro, crujiente por fuera… un diez! El local es muy bonito, tiene un ambiente como de toda vida, con detalles que lo hacen muy acogedor. Fuera hay una terraza que está pegada al río que es de los sitios más bonitos donde se puede estar, llena de patitos. Si venís al restaurante tenéis que ir a ver la parte de los molinos, pues hay una superficie de cristal donde se ven las palas moviendo el agua y es precioso. Les pedimos que nos dejaran ver el horno y es impresionante. Un sitio sin duda donde para a comer si estás por la zona. Acabamos con una tarta de queso, que sirven con una base de natilla casera y con chocolate rallado por encima. Brutal. Y no estropean la maravillosa tarta de queso con siropes o mermeladas como en otros sitios. Sin duda, recomiendo mucho!!!!
Ha merecido la pena comer en este restaurante!!
Un clásico que no puedes dejar de probar.
El cordero espectacular y el trato genial.
Tras la comida puedes dar un paseo por el Duraton. Y sestear en una pradera cerca del río.
La palabra que resumiría mi experiencias, sería la de la excelencia.
Nos ubicaron en un rinconcito preciso, donde teníamos a ntros pies el río.
No he probado un lechazo y arroz con leche tan deliciosos, se percibe el cariño puesto. ¡Quizás por eso me recordó a los de mi madre! Muy recomendable, yo repito seguro 🧡✨
Sencillamente brutallll…excelente atención, excelente lechazo…y por supuesto el molino. En Primavera Verano tiene que ser espectacular. Los postres muy bien, la tarta de queso generosa.
Buena materia prima, bien cocinada y acompañada de buenos vinos. Los espárragos y la morcilla simplemente exquisitos, y el cordero espectacular. Los postres muy ricos (torrijas, arroz con leche y ponche segoviano) y el vino, muy rico como no podía ser de otra manera. Repetiremos sin duda.
Venir a Peñafiel y no parar aquí, es como ir a Sevilla e irse sin saber lo que es un Piripi. A destacar de entradas los riñones y mollejas, y de segundo un lechazo, menú “colesterol Free” que una vez al año, no hace daño. Para los obsesos de lo sano, las alcachofas imprescindibles
El edificio es muy bonito, es un antiguo molino muy bien conservado.
La comida muy buena, el lechazo increíble (hay que encargarlo con antelación). El servicio amable y atento. Y por si fuera poco, tiene una zona exterior junto al río donde hemos tomado el postre y el café, un lugar precioso y tranquilo. Sin duda volveremos.
Segunda vez que acudimos, el lugar es excepcional, un antiguo molino y el espacio exterior para el café es inigualable. La comida deliciosa, el timbal de cordero es espectacular, el arroz con caza menor, las manitas… y el servicio es muy profesional y amable. Se ha convertido en un sitio de referencia para nosotros en Peñafiel.
Sitio bueno para repetir. Lo que más me gustó es la variedad de vinos que tiene, el arroz que venía con conejo y el rabo de toro, lo que menos fue los espárragos que por probarlos no están mal pero que no volvería a repetir.
Me encanto este restaurante! Fuimos sin reserva y estuvimos unos 20 minutos fuera porque lo permitió el clima y fue bastante agradable. Todo lo que ordenamos estaba en su punto y de muy buen sabor, las chicas muy majas todas, volveré sin duda! Precio acorde.
Todo buenísimo!
El vino (Emilio moro)
El 1/4 de lechazo
Las vistas son espectaculares
Uno de los detalles es : ellas se sientan al final del servicio juntas a comer en el comedor es algo súper particular y muy bonito al ojo del cliente genera mucha confianza y acogida!
Catherine Lara Guerrero
+5
Nos fuimos encantados de este restaurante por todo, tanto por el trato de la persona que te recibe como por la comida. Buenísima. Y el vino de la casa originario de allí estaba buenísimo.
Mucha opción sin gluten. Apto para celíacos.
Muchas gracias por toda la atención.
Además tiene su encanto el restaurante.
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