Tuvimos que apuntarnos a una lista de espera para entrar y cuando entramos a comer entendí por qué, la comida muy buena, desde el pulpo al raxo, ni que decir de los postres caseros. Si hablamos de la atención del personal me gustaría felicitar a los dueños, nos atendió en la planta de arriba un camarero maravilloso, un chico de perilla con el pelo rapado y delgado, qué profesionalidad y qué amabilidad por su parte en todo momento.
Los precios nada caros, lo que hacía una relación calidad-precio extraordinaria. Volveremos sin duda.
Punto fuerte y q valoro mucho: es el único lugar donde puedes ir a cenar más temprano (ya q estuvimos dando vueltas y todos los restaurantes comenzaban a dar cenas a las 20.30). Gracias a Manolo (de Hostal Maia) por su recomendación y por acercarnos al lugar! Todo lo q comimos estaba rico, no dejéis de pedir pulpo! El personal atento, diligente y con una sonrisa, pese a la gran carga de trabajo q tienen! No duden en ir … así tengan q esperar x una mesa!
Excelente relación calidad precio. Fuimos un grupo de 8 personas y nos atendieron muy bien, con amabilidad y rapidez. Destacar las croquetas, están brutales; el queso me pareció un timo en cuanto a cantidad; la empanada no me gustó (aunque a los demás sí); el pulpo bueno pero mejorable; los pimientos estupendos; la zorza muy rica también y la tortilla excepcional. El vino de la casa hay que probarlo. En conclusión, un sitio muy recomendable.
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