Nos ha encantado la comida, con muchas opciones aptas para celíacos, sin gluten y sin contaminación cruzada.
Tienen pan y cerveza sin gluten (me los ofrecieron pero no los probé), croquetas, queso frito, fritura de verduras, patatas fritas, y de postre (hoy) tarta de queso y tarta de chocolate casera.
El entorno es precioso, unas vistas espectaculares de Ojén, y piscina para el verano (la abren ya mismo, el 9 de junio).
El servicio muy amable, explicando muy bien todas las opciones aptas (algunos platos marcados como con gluten en carta son adaptables), y amabilísimos con nuestra perrita Duna (admiten mascotas en la terraza).
Además, es una combinación perfecta para hacer alguna ruta de senderismo en El Juanar, La Concha, etcétera, y darse un homenaje a la vuelta, que es lo que hicimos
Pedimos:
* croquetas de setas (riquísimas, con el rebozado crujiente, y mucho sabor a setas; tenían también de cocido y de jamón).
* ensalada mixta
* chuletitas de cordero
* solomillo ibérico al romero (plato estrella de la casa, y estaba buenísimo; por cierto, las patatas fritas son aptas, las fríen siempre en un perol aparte).
* tarta de chocolate casera (la mejor que he probado, riquísima, con harina de almendras, nueces, cobertura de chocolate… la suelen servir con helado, pero me informaron que no me lo podían poner porque podía contener trazas de gluten, lo que da tranquilidad de que conocen el tema).
Un sitio en el que repetir seguro, sobre todo en las tardes de verano, para huir del calor.
Sitio fantástico un restaurante espectacular, con un magnífico aparcamiento, jardines y piscina, y la comida riquísima y destacar en especial a OMAR responsable del restaurante, volveremos sin duda
José Antonio Domínguez
+5
Fantástico sitio con excelentes vistas y una carta muy interesante con gastronomía de la zona. El servicio muy atento, rápido y eficaz. No teníamos reserva pero nos hicieron un hueco. El establecimiento está junto a instalaciones deportivas (piscina y campo de fútbol). Destaco el ajoblanco, pollo a la crema y los postres. Había un baño con un grifo obstruido, pero entiendo que será algo puntual. Volveré seguro.
Un disfrute cada vez que voy, puedes comer de todo, desde comidas caseras de siempre a un cochinillo espectacular o un cous cous de pollo exquisito.
Amplia carta de vinos con una bodega espectacular y no te olvides de la variedad de la cervezas, las vistas al pueblo de Ojén espectacular y si vas con niñ@s disfrutarás de las instalaciones.
Yo soy cliente habitual del Fogón de Flore, con Omar a la cabeza de un gran equipo donde te ofrecen amabilidad y cariño.
De los mejores solomillos que he probado en mi vida, tierno, un punto perfecto, un sabor excelente y un aliño de tomiño inmejorable, lástima no haber sacado fotos.
100% recomendable.
Trato familiar, unas vistas preciosas y una cocina sencilla y deliciosa. Hemos pedido para compartir una ensalada templada con bacon y gambas y una pierna de Chivo con sus papatitas y pimientos. El Chivo estaba riquísimo, jugoso y nada graso. De postre un helado de mandarina sabroso y refrescante.
Volveremos seguro.
Comida por trabajo, hay que decir que no hay menú del día. Pero tiene una carta muy variada con productos de la zona. Pedí un solomillo strokonoff que estaba espectacular, toda la comida es casera y tengo ganas de probar mas carta jajajaja. El lugar es precioso tiene unas vistas muy bonitas de Ojen y ambiente muy agradable y tranquilo. El servicio es muy correcto, sitio en el que volveré en familia seguro.
El mejor restaurante de Ojen sin lugar a dudas...el lugar es ideal...soleado todo el día y su personal de 10. Omar siempre nos ha tratado muy bien, gracias!!!
Y la comida excelente, sabrosa,...casera!!
Sí, cinco estrellas. Este restaurante destaca por todo: ubicación, calidad, precio y atención. Imprescindible probar su solomillo de cerdo al romero, pero todo lo que te recomiendan también. Excelente relación calidad precio y servicio muy profesional y atento. Ha sido una cena, pero tenemos que repetir pronto para almorzar y así poder disfrutar de más especialidades. Si te apetece, cuenta además con una magnífica piscina.
Increibles vistas, buena comida y buen servicio. La verdad que nos ha sorprendido mucho el sitio. Muy recomendable. Sin duda volveremos.
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