Pequeño local de excelente comida marroquí. En su carta, puedes degustar desde un increíble Cous-Cous de pollo o cordero hasta los típicos dulces marroquíes, por supuesto acompañados de un buen té moruno. No faltan los kebab (pollo y cordero) de realización casera, nada que ver con los “rulos de kebab” industriales. Además, la salsa de yogur también es casera y está riquísima. Y por supuesto, tienen pinchitos (pollo, cordero y kefta), pastelas, Briwat, Harira y Falafel. El local dispone de una pequeña tabla a modo de barra con 3 taburetes altos y una pequeña terraza con unas 4 o 5 mesas a la intemperie. También puedes realizar pedidos para llevar. El trato por parte de los trabajadores es muy bueno, amable y cercano. Es un lugar que frecuento y que recomiendo a todos los que quieran disfrutar de una buena comida marroquí sin salir de Marbella. Como dato a tener en cuenta por parte de los propietarios, añadiré que tienen que mejorar en el servicio de recogida de pedidos. En mi caso, llamé a las 13.15H para hacer un pedido de cous-cous de pollo para recoger a las 14h. Cuando llegué al local, me encontré con que había cola de gente que también había llamado para recoger sus pedidos a las 14h. Y como consecuencia de ello, tuve que esperar en el local 30 minutos. Lo peor de todo, es que la comida estaba hecha sólo que no estaba preparada para llevar. Y para colmo, el chico atendía antes a la gente que iba llegando en lugar de los que habíamos llamado y estábamos allí esperando. Por lo demás, estáis tardando en ir a probarlo.