Un gran descubrimiento de cocina venezolana, con unos platos riquísimos y un espacio super agradable.
Me fascinaron en especial sus tequeños artesanales, el asado negro y el quesillo, recetas muy bien logradas e inolvidables. Todo lo que probamos estaba riquísimo.
Un equipo super atento en sala y
Restaurante de comida venezolana. Solemos ir a tomar algo porque es muy acogedor, la atención muy agradable y la cerveza siempre te la ponen muy fría y con copa congelada también si quieres. Las tapas riquísimas, siempre de estilo venezolano. La carta tiene muy buena pinta, con ganas de comer un día
Quisimos probar y la verdad es que nos gustó bastante. Pedimos una tabla de "minis" para probar un poco todo. Y después nos decidimos por los tostones y una arepa de cerdo asado. La comida muy buena, sabores muy curiosos. Quizá algo caro para lo que es. La camarera que nos atendió muy simpática y ag
¡ESPECTACULAR! Muy sorprendidos con este restaurante nuevo. Personal muy atento y amable, calidad en la comida y muy buena presentación. Calidad-precio muy buena. El sabor impresionante, más que recomendable. Volveremos para seguir probando la carta! 😉
Probamos las empanadas y son crujiente y con la textura perfecta, la arepa de reina estaba increíble. La comida está excelente, todo lo hacen al momento y está súper fresco, calidad precio vale totalmente la pena, restaurante venezolano como pocos en Madrid y que se lo recomendaría a cualquiera,
He viajado a San Sebastion por razones académicas y he visitado el Patio de Marisol, me he tenido el placer de comer una cachapa (que la sirven en una torres de tres piezas medianas con queso de mano, queso rallado y natilla) acompañada de un exquisito guiso de rabo. Para la comida un 10, el lugar
Calidad a buen precio!! Comida buenísima venezolana aunque tiene algún plato como el rabo de toro que te deja sin hipo! Buen ambiente! La atención es de 10! Repetimos seguro
Raciones abundantes y sabrosísimas. Un servicio inmejorable. Tremendo descubrimiento.
Comimos: tostones (de lo mejorcito), empanadas, tequeños, pabellón y asado negro (una auténtica pasada). De postre la tarta de queso ha sido una locura.
Volvemos seguro!!!
Excelente atención, el local muy bonito, bien decorado y espacioso, y la comida me transportó a la Venezuela de los 90, el sancocho estaba exquisito, la carne se deshace, y con muchos vegetales, como las reuniones de domingo en familia. El asado negro muy rico también, lo acompañamos de plátano asad
¡Deliciosa comida y súper atención de los/as empleados/as! Nos ha encantado como para repetir. Tienen juguetes para que los niños estén entretenidos. Tiempo de espera súper bien y sabores muy buenos.
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