Comimos allí hace unos días. Pedimos rabo de toro y presa ibérica de bellota con migas. El rabo estaba súper rico, un plato enorme a un precio bastante razonable. La carne se deshacía fácilmente. Las patatas fritas estaban muy rica y se notaba tanto en el corte como en el sabor que era de muy buena calidad. El precio súper interesante no llegaba a 18€. La presa ibérica de bellota muy muy rica y también el precio era acorde a la cantidad y a la calidad. No llegaba a 20€. Lo que menos nos gusto fue la tardanza en traer los platos aunque mereció la pena la espera. Eso si sería mejor que el personal esté pendiente de todos los clientes para que no pidas una cosa y después digan ah bueno ahora le atiende el camarero que yo no llevo eso?!
Nos gustó el toque cordobés! Recomiendo probar las Nenas, un plato sorprendente, cítrico y fuerte para empezar. Las ortiguillas muy ricas. Pedimos también los flamenquines, pero no fue el mejor plato... muy seco. La tarta de naranja y chocolate muy rica!
Cena en pareja que en un principio íbamos al C.C. Arturo Soria Plaza pero vimos la terraza tranquila y sin tanto jaleo como allí y decidimos quedarnos. Pedimos unos tintos de verano y de entrante ensaladilla de langostinos. Luego tomamos chocos a la andaluza y un flamenquin de lomo relleno. Todo estaba muy rico y quizás la única pega era que la ración de chocos tenía poca cantidad. Seguramente volveremos por la zona porque estuvimos muy agusto.
Cené con una amiga, ambiente tranquilo en la terraza acristalada. El servicio decente, algo lento y despistado (nos tubimos que levantar a por el pan). La comida de calidad, las raciones no muy grandes y cocina cordobesa. Remojón cordobés acevichado muy rico, habitas con foie muy decentes y Calamar de potera a la parrilla muy recomendable si os animáis a ir. De postre una sorpresa agradable, Tarta de naranja amarga con chocolate. Una botella de vino "Habla la Tierra" y dos cafés, por 90€. Precio caro, pero buen producto. Volveremos.
Nos ha sorprendido este sitio. La comida está francamente buena. Sitio acogedor, velada fantástica. Tiene muy buena cocina. Cenamos berenjenas con salmorejo, riquísimo, ravioli de rabo de toro con salsa de setas, para chuparse los dedos, y flamenquin de pluma ibérica con jamón ibérico y queso curado. Bebimos un buen Ribera de Duero. El camarero que nos atendió, Manuel, nos aconsejó muy bien y es muy detallista y está pendiente de los comensales. Nos invitó al postre mientras terminamos el vino.
Sin duda volveremos, ha sido muy agradable.
La atención estupenda, todo el personal es súper amable y la comida espectacular!! Estoy segura que repetiremos.
Nos sorprendió que no hubiera mucha gente al principio porque de verdad que el sitio merece mucho la pena.
Pedimos para comer las nenas, revuelto de salicornia y erizo, callos de bacalao, ensaladilla de langostinos y flamenquin de pluma, de postre tocinillo de cielo y leche frita.
Buena terraza. Atención amable. Cocina lenta (no vaya con prisa)
* Revuelto envuelto de bacalao: Muy normalito.
* Flamenquín de pluma ibérica: Bueno. Pero no noté el sabor de la pluma por ningún lado.
* Ferrero Rocher: Hecho con capas de oblea y Nutella.
* Tarta de chocolate y naranja: Bizcocho húmedo y jugoso con chocolate caliente por encima. Muy buena 👍🏻
Una gran cocina y mejor servicio, porque cuando hay ganas y ganas de hacerlo bien... Es lo que pasa.
De la comida ya podéis haceros una idea con la foto de las cocochas de bacalao, y no hay más fotos porque nos hemos olvidado de tan rico estaba 🤣.
Nos ha atendido Manuel, con todo detalle, en interior muy ventilada y poquísimas mesas (en las fotos se ve). Además tienen terraza exterior y terraza interior, o sea cerrada con techo pero ventanas abiertas.
Mucha amabilidad y buen asesoramiento.
Las raciones son amplias Y Manuel nos avisó, pero.... no hemos llegado a los postres. Y los precios son muy razonables para el sitio, y todo lo que recibes.
Volveré y haré fotos ¡Prometido!
He ido dos veces en una semana porque me gustó mucho la cocina y el servicio, pero en esta segunda visita la experiencia no ha sido tan buena. Había sólo una camarera para todo el servicio, y aunque en la carta indica que cobran 2€ por persona por pan, regañás y aperitivo, nunca vimos el aperitivo, y en la primera visita al final nos invitaron a un chupito y esta vez nada; cuando pones el listón alto hay que mantenerlo, es la manera de conseguir clientela fiel, no obstante les daré otra oportunidad, la ensaladilla estaba deliciosa y el rabo de toro impecable.
La Nena cuenta con una carta muy cordobesa que se puede disfrutar en la terraza descubierta, en la cubierta o dentro del propio local.
Todo lo que pedimos nos gustó mucho (en especial las patatas al pelotón 😍🤩) aunque cabe destacar la simpatía del servicio con las bromas que nos hizo. La atención fue muy buena aunque por poner una pega los tiempos de espera en algún ocasión se nos hicieron un poco largos.
Las distancia de seguridad y todas las normas de COVID nos parecieron que se respetaban, comimos muy a gusto.
Es un lugar recomendado. Merece la pena cruzar la calle desde el centro comercial de Arturo Soria para comer en la Nena.
Ya se puede disfrutar en la zona de Arturo Soria de un nuevo restaurante que lleva el sello de Ángel Mata, su socio y asesor gastronómico: La Nena. Un restaurante que pretende acercar la cocina cordobesa hasta nuestra ciudad, con una carta repleta de sus platos más emblemáticos como el Salmorejo, el rabo de Toro, la Mazamorra o los Flamenquines...
Según nos contaba Ángel Mata, el asesor gastronómico y socio de La Nena " Nuestra carta se caracteriza por el respeto a la tradición y al producto. Una cocina actual y creativa con carnes de ibérico del Valle de los Pedroches (COVAP), vinos generosos de Montilla Moriles (Pérez Barquero), y los aceites de oliva virgen extra de Priego de Córdoba (Almazaras de la Subbética)".
Un local enclavado muy cerca del centro Comercial Arturo Soria Plaza, una zona privilegiada rodeada de jardines en la que disfrutan de una amplia terraza (una parte cubierta y otra al aire libre).
La carta de vinos repleta de vinos generosos, un guiño a los vinos andaluces.
Un restaurante que perfectamente podría encajarse como los buenos/bonitos/baratos una buena opción con una cocina sin pretensiones pero en el que escogen la mejor materia prima. Ideal para ir con familia y amigos y disfrutar de su amplia terraza.
Maria Victoria Bel Vignal
+5
Nos encantó el restaurante, la comida muy buena y el trato del personal exquisito. Tambien había musica en directo un chico con su guitarra nos amenizo la cena. Volveremos seguro y lo recomendamos sin duda
LOS OLORES Y SABORES DE ANDALUCÍA SE CONCENTRAN EN LA NENA, JUNTO AL ARTURO SORIA PLAZA
Llega a Madrid, al lado del centro comercial Arturo Soria Plaza, un nuevo restaurante de estilo andaluz-cordobés, decorado de manera sencilla y muy agradable.
La cocina, como característica, es de lo más original con un guiño a los tradicionales platos pero creativos como las Nenas, unas medias limas con trocitos de bacalao, los boquerones con limón, y los chipirones rellenos con su tinta.
No falta tampoco el salmorejo y, algo delicioso, las berenjenas y los increíbles rabiolis rellenos de rabo de toro. Callos de bacalao de morro. Magnífica la presa ibérica a la brasa. Flamenquines de lomo ibérico de bellota y de pluma ibérica de bellota.
Bodega seleccionada y sorprendente. Tienen, entre otras, la cerveza malagueña Victoria, que no es fácil de encontrar en Madrid.
El personal encantador, guardando las distancias, con sus mascarillas, y cumpliendo todos los protocolos que el covid obliga en estos tiempos.
Tienen una zona de barra, salón comedor, terraza cerrada con calefacción y una terraza exterior.
La visita es obligada a los baños aunque no tenga necesidad, son una pasada.
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