Clásico bar de los que ya no quedan en Madrid. El servicio es clásico. La calidad de la comida es clásica, y el café es muy bueno. Para los buenos entendedores media opinión basta. Me encanta ir a este sitio para recordar mi vida de los años 80 en Madrid. Para los que están buscando un sitio más Cool, esto no es para vosotros, por suerte. Ja ja
Bar de barrio en la calle San Bernardo cerca de la Gran Vía, Malasaña. Tienen un montón de raciones sin pretensiones pero seguro que muy buenas: hamburguesa (6,95), ensaladilla, albóndigas, ...
Me gusta y he venido bastante veces porque tienen una tortilla muy buena (7/10), eso sí cada vez es distinta, depende quién la prepare 😂, a veces la tienen con pimientos, ...
Se puede desayunar cómodamente en este bar de toda la vida.
Mireia Galocha de Freitas
+5
Entramos sin querer, y la experiencia fue genial. Es cierto que no te imaginas el tipo de trato y comida que pueden manejar los propietarios de esta cafetería/bar. La mejor tortilla que he probado, genial. Nos sorprendió en todos los sentidos para bien. Muy amables. Era como estar en casa. El local no tiene nada destacable pero solo por la calidad de sus platos y el trato vale la pena entrar. Es el típico local que si le dieran un toque mas moderno estaría lleno 24/7. Su dueña, muy cercana, nos hizo pasar muy buen rato. Gracias!
Comida muy rica, mención especial a la tortilla de patatas que está buenísima.
El personal es muy atento y muy amable, además muy rápidos.
Típica cafetería del barrio.
Atención muy profesional y amable.
Desayuné el clásico café con leche y las clásicas porras, muy buenas.
Marcela contreras solis
+5
Excelente servicio y muy amable el sr que nos atendió hoy! Muy rápido y muy rico todo! Realmente vale la pena
Como extranjero en Madrid, sentí que es una cafetería muy típica, con precios iguales al promedio de la zona, una buena atención y rica tortilla.
Me recordó a los bares antiguos de mi infancia. Me a dsdo añoranza, todo muy bueno volveré seguro!
Un bar de toda la vida, con cosas típicas de Madrid. Se mantiene desde hace muchos años. Se puede tomar un café con porras. Yo personalmente estoy harta de franquicias y cafés sin alma. Cuando fui había un camarero solo con el bar a tope para hacer desayunos. Esperé un poco me pidió disculpas por la espera pero disfruté de un desayuno de los de antes.
Un clásico con una larga andadura. Después de un tiempo descuidado vuelve a brillar como cafetería de barrio con todas sus comodidades y ofertas. La cocina funciona y el tratamiento es muy acertado combinando calidad y clasicismo. Sitio para disfrutar,parada de referencia.
Por fortuna sigue habiendo bares de toda la vida en una zona marcada por la bohemia. El servicio es atento, eficiente y la decoración, las tapas, los baños... pues eso: de toda la vida.
Camareros muy amables. Entramos por que pensamos que era un bar de toda la vida y así fue. Calidad precio un poco caro . Dos tostadas con jamón serrano, dos cafws y un zumo naranja 11,35€
Un lugar auténtico, cuarenta años abierto me expresó su dueña. Un de las mejores tortillas que he probado, aunque tienen gran variedad de tortillas. La comida se nota que esta echa con cariño. El trato es muy bueno y los precios razonables. Un lugar donde desayunar o almorzar. Los baños estaban muy limpios.
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