Comimos en la terraza que no está mal, aunque nada destacable. Pedimos la ensaladilla (buenísima), arenques (muy buenos, diferentes), las setas (lo mejor) y media tabla de quesos para terminar (bastante fuertes todos).
En general muy buen sitio. Con las bebidas ponen aperitivo. La atención un 10
Acogedor restaurante, con una cuidada y sugerente carta.... Probablemente de las ensaladillas rusas más ricas que he comido, junto con salmorejo y tacos de rabo de toro... Sitio pequeño pero confortable, personal correcto. No es barato, pero usan buena materia prima.
Pequeño restaurante ideal para comer a base de tapas. Mejor en la terraza que dentro. Las raciones están muy ricas y son variadas. Recomendable la cecina con foie, la ensaladilla y las alcachofas. Buenos vinos para tomar por copas. De postre y para seguir tomando el vino, nada mejor que una tabla de
Después de muchas visitas,no se puede poner ningún pero, te dan lo que dicen que te dan
Una tapa de bonito ahumado con cebolla roja encurtida, excelente
Unas setas de temporada con huevo, que no un revuelto, y paletilla ibérica.dificil de superar
Dos tipos de yozas , carne y gambas, perfecta en su p
Sitio no muy conocido en el distrito de Retiro, pero que goza de unos productos de una calidad excepcional. Los arenques son de destacar. La carta de vinos es espectacular. El local es especialmente acogedor y da la tranquilidad que pocos sitios de la zona aportan.
Solemos visitarlo con frecuencia, muy interesante, nos gusta pasar a cenar, probar buenos vinos, y aunque no tienen cocina como tal, tienen pocos pero buenos platos.
Todo un descubrimiento. Fuimos casi por descarte y menuda joya. Bodega de primera, productos de calidad excepcional, y bien atendidos (aúnque un poquito lentos). Para repetir.
Genial sitio donde disfrutar de comida sin prisas y sin plancha.
Todo crudo o macerado pero con sabiduría y estilo.
Sardinas ahumadas, arenque, ensaladas de tomate, tacos de atún ¡estraordinarios!, ensaladilla, gyhochas, steak tartar, y una bodega muy bien elaborada.
Todo esto en plena calle de Majo
Uno de los sitios favoritos cerca del retiro. Un lugar tranquilo para dejarse aconsejar por un buen vino. Hay que probar si o si el arenque y la sardina ahumada !!
Para el mundo gastronómico que se encuentra en Madrid, en La Hidalguía sin duda, es una de esas experiencias diatintas al paladar que merecen gran reconocimiento.
Hay que entender que aquí no hay fogones. Por supuesto hay platos calientes. Debo resaltar el tartar de carne, los boletus, las habitas b
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