Un restaurante italiano muy elegante y con una terraza maravillosa.
He ido un par de veces, una en pareja y otra con unos amigos y en general me ha gustado. Pongo cuatro estrellas porque comparando con otros italianos, y la calidad de la comida de otros restaurantes, no me parece nada del otro mundo para tener esos precios…
Quizás un sitio para ir puntualmente a celebrar algo.
Eso sí, los postres nos encantan, la atención es exquisita y la terraza preciosa, con un toque romántico y muy acogedora.
Atención del personal excelente, los platos abundantes y muy ricos.
Un entorno muy agradable para disfrutar de una cena. La carta no es muy extensa y los precios son elevados para para el tipo de plato que es.
Me recomendaron una copa de vino, y el precio también fue algo elevado ( bastante) . Por lo demás, un sitio para conocer.
Fuimos a comer a este restaurante, el trato fantástico, la calidad de los platos era buenísima, y el tiramisú que te lo preparan en la mesa, todo un placer para repetir seguro. El precio es elevado pero la calidad y el trato permiten tener una carta con esos precios. Volveremos
Yo lo resumiría en un 3.5, la atención y el lugar es espectacular, no hay queja alguna son de 10.
En cuanto a la comida que para los precios que tiene debería ser una absoluta experiencia, la verdad es que no lo es, lo sentí muy normal y no es la sensación que quería tener al finalizar la comida.
El postre fue lo mejor, no recuerdo el nombre pero tiene mango y es una auténtica mezcla de texturas y sabores.
Para finalizar mi reseña y si llegan a leerla, los años en la hostelería me han hecho ser muy detallista con cosas que para un comensal común suele pasar desapercibido, los platos, copas y cubiertos podrían tener mejor apariencia, es decir en algunos casos las copas estaban empañadas, con muchas huellas sobre la base, igual que los tenedores!
Agradable lugar con exquisita decoración. Patio interior muy acogedor. La carta es reducida pero selecta. Buen servicio (todo eso se paga…). Nos gustó mucho el tiramisú que terminan de preparar frente a los clientes
Restaurante italiano con una decoración super bonita , pedimos para dos un Steak Tartar , Flor de Calabacín, Pasta con trufa blanca , Tagliolini rueda de pecorin y Tiramisú , por lo general una comida agradable , pero tampoco comimos nada que nos sorprendiera , las mesas se encuentran demasiado juntas y te puedes enterar perfectamente de la conversación de la mesa de al lado .
Si vais tenéis que pedir si o si el tiramisú .
Sinceramente, nos encantó este sitio. Fui a cenar con mi mujer sin conocer en mucha profundidad qué esperar, y tanto el propio sitio (que es precioso) como la atención y explicaciones del metre, hizo una noche inolvidable.
Como plato principal tomamos la pasta hecha en mesa (tagliolini) con ginebra y caviar, que me encantó. No sería apropiado si no te gusta mucho la mantequilla.
De postre, tiramisú, también hecho en mesa. De los mejores que haya tomado nunca.
Me
Me costó un poco encontrar el vino que tomamos, porque la carta tiene nivel y no quería arriesgar.
Dos cosas: si esperas los platos típicos que vemos en todos los italianos y pizzas, no vengas. Si esperas que un italiano debe ser un sitio barato, tampoco vengas. Esto es algo más.
El ambiente es precioso tienen cuidado cada detalle para que te sientas a gusto, de entrante hemos pedido carpaccio y estaba deli, de principal fue un rollete de cabrá con trufa y para finalizar un postre de chocolate que alegra al corazón. Fue una cena especial así que he salido muy contenta ese día. Para mi gusto todo estuvo espectacular ese día.
Un restaurante con comida de alta calidad y un sitio agradable con una muy buena terraza.
La terraza es ideal pero si hace mal día o medio lluvioso es mejor reservar dentro porque no toda la terraza está cubierta.
Recomendaría:
- tartar de salmón
- ravioles de rabo de toro, son de otro planeta de buenos
- tagliolini de setas con rueda de gorgonzola
De postre pedimos el chocolate que estaba bueno pero tampoco me pareció espectacular.
El servicio presionó para que fuéramos terminando pero todavía no había finalizado nuestro turno, eso es un punto de mejora.
El lugar tiene una decoración y entorno increíble, con un toque vintage. Estuvimos durante la hora de la comida y está bastante tranquilo, el ambiente en general es bastante formal pero el personal es maravilloso, la comida deliciosa pedimos un tartar de salmón, la ensalada de burrata que estaban muy buenos y 2 platos de pasta 1 de pesto que no nos gustó mucho y el otro de trufa que fue delicioso , las raciones correctas, la experiencia muy buena, tienen en el exterior un jardín precioso aunque optamos por comer dentro porque hacía mucho calor.
Es un restaurante precioso y elegante, con un ambiente maravilloso. Fui a cenar aquí con mi novio, bajo reserva.
Nada más entrar, nos encontramos con un personal muy agradable, que nos dirigió directamente a nuestra mesa, sin ningún tipo de espera.
Nos dieron la carta y nos costó un poquito elegir ya que había varias opciones muy atractivas. Nos decantamos por el tartar de salmón y aguacate para comenzar, una decisión más que acertada, porque estaba de fábula. Después, pedimos espaguetis a la carbonara tradicional, y girasoli de calabaza asada. Espectacular y deliciosa toda la comida que elegimos.
El servicio fue perfecto, muy buena atención y trato por parte de todos los trabajadores.
Además, teniendo en cuenta que fuimos en agosto y hacía muchísimo calor, la temperatura en el restaurante era idónea, estuvimos muy cómodos.
Cristian Lavin Lorenzo
+5
Italiano de los de verdad, con carta pequeña, controlada y de calidad, no esperes encontrar pizzas porque no es ese tipo de italiano, son especialistas en pastas y lo demuestran.
Hay dos ambientes bien diferenciados, el interior sobrio y elegante, muy confortable ideal para una comida de trabajo con clientes por ejemplo y una terraza exterior que es un auténtico espectáculo, ideal para comidas y cenas desenfadadas en verano.
Ojo a su carte de vinos y sobre todo de coctelería porque te sorprenderá.
Sitio para repetir sin duda.
![5]( "Recensione")
Precioso restaurante con deliciosa y cuidada comida el ambiente es muy bueno pero suele estar concurrido.
Comimos carpaccio de ternera que sirven con espárragos laminados, rúcula y cremoso de parmesano que le da un toque espectacular; raviolis de rabo de toro y panzerotti con pera y salsa gorgonzola (están espolvoreados con almendra rallada a mi gusto sobraba, aún así deliciosos). Re aperitivo sirvieron una mortadela trufada también exquisita y de beber tomamos sangría en la que pusieron frutos del bosque que le daban un toque muy interesante. Estaba bastante dulce pero no lo suficiente como para empalagar por lo que refrescaba y se dejaba disfrutar. Te postre pedimos lingote de chocolate que es un coulant servido con helado de vainilla que también está espectacular.
En resumen es un restaurante elegante, con buena cocina y buen servicio. Ideal para ir con la pareja, reuniones de negocios u ocasiones especiales. Todo un 10. Añado el vídeo de cómo preparan el tiramisú un situ y otros dos platos de otro día: gnocchi con perdiz y calamarata a la Amalfitana con pulpo borracho(pasta imitando las anillas de un calamar) con salsa y trocitos de pulpo. Ambos platos deliciosos.
🍝 Restaurante italiano del centro de Madrid. La comida es buena y con calidad. El ambiente es elegante y refinado. El servicio a la altura.
En este caso pagas por todo me explico: local, comida, ambiente, exclusividad…
Tal vez esté en mi top 2 de restaurantes italianos. El precio que pagas es acorde a la calidad y al lugar aunque el servicio, muy atento, está falto de ciertas normas exigibles en un lugar de ese nivel. No es algo que me importe jamás pero sí que me llamó la atención. Por ejemplo pedimos dos vasos de agua y otras bebidas y nos trajeron el agua caliente. Por lo demás un sitio para volver siempre que tu economía lo permita: 150€ para 2 personas con entrante, cocktail, dos platos principales (uno de ellos tagliatelle con langosta) y postre.
Muy buena ubicación y local perfecto tanto en salón como en terraza. Atención esmerada, buen ambiente y buena presentación, con precios acorde a lo esperado, como el aperitivo que se cobra y es lo que se presupone en este tipo de locales. A destacar la carbonara que se prepara en la mesa auxiliar y el tiramisú que también te lo preparan en mesa y están riquísimos. Con todo lo expuesto y con vino y licores no es excesivamente caro.
Viernes en Madrid y llegar sin reserva fue precioso que nos dieran una mesa de inmediato. El Staff muy amables y atentos. La ensalada Mediterránea muy rica aunque si me falto el Punch de la Bergamota, no se percibía casi en la vinagreta. El tartar de Salmon y Aguacate buenísimo, Me encanto el detalle de emplatado separado de la Lasaña de Calabacín y Alcachofa. Y que decir del Tiramisu de la Nonna. Noche de una tarde de paseo por Madrid que acabo en una experiencia maravillosa, tanto por el sitio y su ambiente, como por la compañía. Habrá que volver a disfrutar. Con reserva claro de la preciosa terraza del fondo. Muchas gracias por todo !!!
De los mejores italianos de Madrid!
La comida espectacular, fresca, variada y deliciosa, ambiente único y atención de lujo.
Merece la pena visitarlo! 120% recomendado!!!
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