Hacen los hojaldres mejores de todo Madrid. La conozco desde mi infancia donde mis padres me llevaban a menudo a por volevanes, frutas confitadas, hojaldres rellenos, pastas...etc podría seguir porque todo es y está buenísimo.
El visitarla es todo un placer para los sentidos y para mis recuerdos del madrid de toda la vida. Gracias por no cerrar y sobrevivir en estos tiempos.
Un lujo para el paladar, para la vista. Obras de arte en pastelería, en sus productos. Ante tanto dulce químico. Que nunca se pierda. Un diez no, un mil. El trato estupendo.
Un hojaldre único , el mejor de los mejores , una pastelería con los mejores productos de una calidad soberbia , soy la tercera generación de mi
Familia que seguimos comprando ahí , y eso que yo vivo en Málaga. El personal además de profesionales de lis de verdad un trato inmejorable . Muchas gracias por continuar con vuestra tradición.
Emilio José Garcia Mora
+5
Mi primer trabajo y donde pase mi juventud. Recuerdos dulces, esas planchas recien echas con la cremita caliente. Muy felices navidades. En mi mano tengo el recuerdo de bajar los roscones en cadena por las escaleras... Un abrazo
Siempre que paso por allí me como uno de sus croasant.Son los más ricos de Madrid!!!
simplemente especial. un pedazo de historia. una ventana por la que observar el antiguo Madrid del que ya queda bien poco.. Ojalá no cierre nunca
Teresa Carretero Martin
+5
la mejor pasteleria del mundo, maravilloso todo lo que hacen. Ademas de la amabilidad del personal que es extraordinaria
Es un ritual ir a esa pastelería en la que parece que se ha parado el tiempo. Todo riquísimo y tradicional. Los suizos y bartolillos son maravillosos.
Negativo: un encargado abroncaba a un empleado y las voces se oían desde fuera. No eran maneras. Las cosas se comenta en privado
Excelente atención y servicio las tapas de lo mejor.
![5]( "Recensione")
Fuente: la Razón
Fundada en pleno corazón de Madrid, paralela a la Carrera de San Jerónimo, encontramos La Antigua Pastelería del Pozo en el número ocho de la calle de la que tomó el nombre. Fundada en 1830 por la familia Agudo, es considerada la pastelería más antigua de España. Pero no fue hasta 1929, cuando Julián Leal Antón cogió el testigo de esta, en la que trabajaba como dependiente desde niño cuando vino desde un pueblo de Soria a la capital para trabajar junto al maestro pastelero. Su legado continúa a día de hoy con su tercera generación. Pese a su escondida localización, la calidad de sus productos hace que sus clientes vuelvan y se conviertan en fieles. Muestra de ello es la cola que encontramos a última hora de la tarde de un frío día navideño. Basta con cruzar su puerta para empezar a entenderlo todo.
Antonio López es el encargado de esta tienda y lleva más de 40 años trabajando en ella. Cuenta que es célebre por su hojaldre, el roscón de Reyes y las torrijas de bizcocho"
Son muy amables, estuve charlando con ellos sobre las pastelerías antiguas de Madrid, ojalá dure otros 200 años como poco y no suceda como al Suizo o la Flor del Pan recientemente desaparecidas
Acceso accesible
Caja registradora preciosa
Una joya
Hojaldre de gran calidad con cabello de ángel o crema pastelera
Pasteles varios con página web... servicio a domicilio solo en Madrid Ciudad, no periférico.
Solo pasteles con trigo ...
Empanadas de sardinas, bonito....y otras.
Servicio profesional y buen servicio amable y atención
Exquisita pastelería, para pocos paladares por su elevado precio.
Me lleve un pastel Ruso de crema está Navidad, no me gusto nada la masa dura y con muy poco sabor.
Una decepción!!!!
Iré a lo seguro hojaldre de crema y torrija de bizcocho.
Hemos comprado el Roscón de Reyes por la fama que tiene. Está bueno pero me parece excesivamente caro. La masa del Roscón no da para exquisiteces, no es un postre de elaboración sublime por lo que creo que no hay lugar para estos precios desorbitados más que la moda de un dulce que todos compramos para Reyes.
itziar beunza apezteguia
+5
El mejor hojaldre de Madrid. Venden unas planchas de hojaldre con crema buenisimas. También muy ricas las empanadas de hojaldre y la bollería.
En 1830, cuando se funda esta antigua pastelería, en Madrid todavía quedaba memoria de la invasión napoleónica. Hoy la tienda, prodigiosamente conservada, recibe la visita de innumerables hijos de Francia y del mundo entero para satisfacer sus mejores sueños dulces y salados. Pues si bien sus pasteles de crema y otras especialidades dulces son magníficas no lo son menos las empanadas saladas de sardinas, bonito, rape o bacalao. Tanto en su versión burguesa de hojaldre como en la más popular de masa de pan.
Y por no hablar de otras dos especialidades. Los roscones de Reyes y las torrijas de Semana Santa. Una joya de comercio y de actividad artesanal. Y a pocos metros de la puerta del Sol.
Excelente pastelería y empanadas, y el mejor roscón de Reyes con al receta tradicional sin rellenos ni creaciones modernas. Excelente.
María Ángeles Martínez Herrando
+5
Maravilla de pastelería. Un negocio que fué familiar y que lo sigue pareciendo en el mimo por sus dulces y por el trato a los clientes. Varias generaciones enganchados a sus hojaldres... Y a todo cuanto elaboran .
Confitería de toda la vida,conserva mobiliario,decoración y una caja registradora preciosa .Pero lo más importante es la calidad de sus productos que te transporta a sabores de antaño ,el hojaldre está de muerte!! .El personal es muy servicial y atento .Es un placer regresar cuando voy a Madrid .
![5]( "Recensione")
Se trata de la pastelería más antigua de España!! Fue fundada en 1830 y comprada en el S.XX por Juan Leal, cuyas siguientes generaciones han seguido con el negocio. Éste está tal cual era: mobiliario, caja registradora, balanza... Un lujo en pleno centro, al lado de la plaza de Canalejas y en la parte trasera del restaurante L’Hardy. .
Son famosos sus bartolillos (dulce típico madrileño) y sus hojaldres, hechos artesanalmente con planchas de hojaldre y rellenos de crema o cabello de ángel, tal cual los hacían en 1830. Otro de sus productos estrella son los roscones (que, por cierto, los venden todo el año). Se trata de un roscón totalmente artesanal, hecho a la manera tradicional, es decir, sin relleno de ningún tipo, con azúcar y almendra molida. Puedo decir que es una auténtica delicia, la masa es amarillita, y sabe a azahar. Los hay mediano (17€ y pico) y pequeño (10€). .
Anteriormente se llamaba Horno del Pozo y se sitúa en la Calle Pozo. Esta calle se llama así porque cuentan que en una casa sita en la misma había un pozo con agua milagrosa.
La pastelería más antigua de España.
Un viaje en el tiempo, mira la lámpara, la caja registradora, el peso, los interruptores..
Las torrijas son de bizcocho borracho con crema. ¡Riquísimas!
El hojaldre es su especialidad.
Antonio es encantador.
¡Gracias por la acogida al grupo!
De los pocos templos que quedan en Madrid. Hay que cuidarlo
He probado las palmeras y la empanada de bonito y realmente está todo delicioso!! Repetiré sin duda!
Maravillosa pastelería. A pesar de ser madrileña, no la conocía. Más de 100 años de tradición, puedes ver el obrador desde la calle. El olor es tan rico que atraviesa la mascarilla. El sabor de los bollos es espectacular, muy muy recomendable. Dicen que no es la más barata, a mí me ha parecido normal para una pastelería que elabora las masas ahí mismo en vez de comprar las masas crudas. Además ese sabor no se consigue con cualquer ingrediente. Estoy deseando volver y esta vez me llevaré media pastelería!
Pastelería tradicional, de las de toda la vida (fundada en 1830, ahí es nada).
La calidad es excelente y tienen productos que no encuentras en otros sitios, como el bollo tipo suizo (torta) con chicharrones. Hacen roscones de reyes estupendos, y todo el año. La empanada de rape y langostinos está muy buena. Pastas, bollería, pastel ruso... Tartas, todo excelente. Cierran los lunes. Domingos están hasta las 14:00h
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