Restaurante en un pueblo de 63 habitantes (censo 2022) dentro de la Sierra del Rincón. Lo regenta una familia que esfuerza al máximo por ofrecer comida casera, de calidad con muchos ingredientes de proximidad. Y el resultado es muy bueno.
Pedí un entrecot con patatas y disfruté de una buena ración de carne de lomo tierno de la zona con unas patatas fritas cortadas a mano y fritas en aceite de oliva.
No esperes una carta amplia ni grandes presentaciones en los platos ni lujos en la mesa. Se puede disfrutar de buena comida en sitios sencillos.
Tienen zona exterior con sombra. Una relación calidad precio muy buena. No vayas con prisas. Tampoco esperarás para ser atendido.
Tras una pequeña ruta por la zona y visitar el ahumadero decidimos comer aqui y fue una gran eleccion.
Una terraza agradable; los camareros muy simpaticos…. comimos el mejor que cachopo que hemos probado nunca……fuera de Asturias :)
Sin duda repetiremos.
Excelente sitio. Comida muy muy buena. Un sitio muy tranquilo, para pasar un rato excepcional. No las probé, pero las hamburguesas es una especialidad y son grandes. Repetiremos sin duda cuando vayamos al norte.
Muy agradecido por la atención.
No dude en parar aquí.
Merece la pena desviarse para probar este restaurante de comida casera con un excelente servicio.
La terraza es muy acogedora y tranquila.
Sin lugar a duda un sitio para repetir.
Con la bebida nos dieron un pintxo.
Las razones son grandes.
Repetiremos 100%
Restaurante muy bonito y tranquilo para ir con la familia. La comida estaba riquísima y las cantidades son muy buenas. Todo es casero.
El trato inmejorable
Volveremos!
Espectacular!!! Y no sólo por el entorno, vistas, y pueblo, sino que cuando entras dentro y te saluda Charo con su sonria y encanto, entras en un espacio único y encantador. Te sientes como en casa, por el trato, comida casera y un largo etc. El precio súper también. Recomiendo ensalada de tomate y cachopo de la Charo, el pan, no te cuento, pan de verdad. Por cierto, déjate aconsejar con el vino tinto, Charo es una gran somelier. 100% recomendable.
Un lugar acogedor, sencillo pero con una comida estilo casera deliciosa. Hemos pedido una ensalada de tomate con queso de cabra muy buena y entrecot de ternera acompañada de ensalada, excelente.
Volveremos a por las hamburguesas que vimos salir para otra mesa. Que pinta tenía.
La atención muy buena de la chica.
Recomendado 100%
La verdad es que es un lugar de diez para comer en un pueblo tranquilo.
Yo fui un domingo y fuimos muy bien atendidos. Muy amables y simpáticos y la comida exquisita. La carne estaba en su punto y un sabor buenísimo. La parrillada de verduras bien también.
Si vuelvo a la sierra del rincón sin duda volveremos aquí a comer.
La terraza muy agradable.
Hemos comido muy bien. Ambiente casero y muy rico todo. Tenían cocido como plato del día pero pedimos a la carta. Todo genial, la tarta de queso casera riquísima. Volveremos.
Que gran descubrimiento! Pequeño Bar restaurante, acogedor con un trato del personal muy cercano y siempre amable. Su terracita es especial y te hace sentirte realmente a gusto. Muchas gracias por todo, estuvimos genial y la comida nos encantó!
El trato y comida espectacular. Un sitio muy acogedor y tranquilo. Recomendable. Volveremos.
Lugar súper agradable, en un pueblo precioso y la mar de tranquilo. La gente del pueblo es muy agradable y amable. El bar la Fragua tiene terraza alrededor del edificio muy acogedor y tranquilo. El servicio es muy atento y amable. La comida está muy rica y es casera con un toque moderno. Relación calidad precio buenísima. Merece la pena volver.
Todo nos resultó muy rico.
Conocimos este lugar gracias a las reseñas y ¡fue increíble!
Es un lugar muy tranquilo; perfecto para disfrutar de una buena comida sin ruidos y muy tranquilo.
La atención fue muy buena y la camarera muy atenta.
Todo lo que pedimos para comer estaba muy bueno. Disfrutamos mucho del lugar.
¡Totalmente recomendable! Además, está muy cerca de Buitrago de Lozoya.
Lugar pequeño muy acogedor y comida de pueblo. Dentro tienen una chimenea y para dos/tres mesas dónde pueden comer dos/tres grupos, todos cumpliendo el distanciamiento en tiempos de covid.
Nos han atendido de fábula, fuera hay más sitio en la terraza pero cuando fuimos no hacía muy bueno y comimos dentro, con reserva claro. Volveremos a ir sin ninguna duda, sitio tranquilisimo y recomendable 100%.
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