La mejor confitería que hay por la zona, y alrededores, todo esta muy rico, un sitio acogedor, se puede estar tranquilo con tus amigos, buen ambiente, cómodo, y con buena decoración. -Dulces: 10/10. Todo lo que tiene esta espectacular, todo es artesanal, llevo desde muy pequeña probando sus famosos gatos de merengue, y a día de hoy sigo pudiéndomelos comer, es una delicia, sus bizcochos borrachos, los cuernos… Todo lo que puedas pedir, no te va a defraudar. Además, las monas son de las mejores que he probado. -Tartas: 9/10. Son espectaculares, contundentes, y de gran sabor, es verdad que alguna vez las tartas estaban congeladas…pero están muy buenas igualmente, y cuando están recién hechas son una delicia. El merengue de esta confitería esta delicioso, no es nada empalagoso, y una tarta de merengue es de lo mejor, junto con el de trufa. La de nata también está muy bien. -Ilorci Roll: 10/10. Es un producto que han sacado hace poco, y realmente para mi parecer está muy bien logrado, está buenísimo, pedí el de oreo, y increíble, tienen de más sabores: pistacho, lotus, kinder bueno…así que, toca probar todos los sabores. -Salado: 8/10. Pienso que no es su especialidad, los dulces están mucho mejor, pero obviamente también está todo bastante bueno, y me gustaría destacar: los pasteles de carne, carrillera, y de sesos. -Desayunos: 10/10. Es una de las mejores opciones para desayunar, si estás en Lorquí, por su gran variedad de productos, y lo bueno que está todo, además de una vajilla de vasos muy bonita, se nota que cuidan los pequeños detalles. Las tostadas de jamón, las de tomate, y aceite, están bien. Pero quiero destacar el cruasán, siempre suelo pedirlo, y está muy bueno. -Cafés/infusiones: 9”5/10. El sabor de los cafés es de muy buena calidad, el capuchino, y el café con leche están muy ricos. Además, las infusiones están bien logradas. -En general es un sitio muy recomendable, la calidad-precio está bien, si que es un poco excesivo el precio, pero realmente pagas por la calidad, pero si los productos están deliciosos, lo pagas con gusto. Todo está muy limpio, el servicio que hemos recibido, siempre ha sido bueno. El único punto negativo que podría poner, es que el local no es muy grande, está restaurado, y lo han dejado mucho mejor, pero a veces se acumula mucha gente. Cuando hemos ido, nunca hemos tenido que esperar, para coger mesa, pero a veces hemos pasado por la calle de la confitería, y todo está lleno. Además, si pides para llevar, y hay gente, si te puedes tirar tiempo esperando. Y si no eres del pueblo como yo, el aparcamiento si que puede ser complicado, y debas aparcar lejos. Merece mucho la pena pasarse por esta confitería, y probar todos sus dulces.

Impresionante la cantidad y calidad de dulces que tienen, lo buenos que están, la calidad/ precio excelente, las camareras muy agradables, todo a la última en dulces y salados, volveré sin duda!!!