Ideal para tomar una copa.
Amplia variedad de licores.
El camarero muy majete, acompañando en nuestras bromas.
![5]( "Recensione")
Como su nombre indica es una cafetería emblemática de Logroño, inaugurada en 1941. Por allí han pasado varias generaciones de logroñeses y visitantes. Pero lo mejor es que su nuevo propietario ha sabido conservar la elegancia y el ambiente de las grandes cafeterías, modernizado su interior, ampliando su oferta y cuidando exquisitamente el servicio. Hoy no sólo es una estupenda cafetería, perfecta para desayunos y meriendas de tertulia, sino que posee una variada carta de pinchos, raciones y comida que le convierten en un lugar privilegiado para comer en pleno Paseo del Espolón. La hora del vermouth es muy animada y además tienen el vermouth que más me gusta: Amillo ( elaborado con mimo por un logroñés amante de Jerez) que está extraordinario. Los Marianitos están servidos primorosamente y su precio de 3 euros es muy atractivo. Los camareros amabilísimos y Saray, la señorita que nos sirvió y aconsejó lo que tomar para acompañarlo, es un cielo. Excelente sitio con terraza al Espolón que no debes perderte.
Antonio José López Lorente
+4
Estuvimos desayunando y todo estaba muy rico.
Precios normales y muy buen servicio, una sola camarera lo llevaba todo, hay que darle un premio al buen hacer, solo le faltaba ser un poquito más alta☺️
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