Pequeño local con un ambiente que nos recuerda Italia. A ello contribuye el rico olor que desprende cuando pasas por delante. Pedimos unas copas de vino, una ensalada y unos tortelini especiales que vienen con trufa. También un pan de ajo. Nos hemos ido con sentimientos encontrados. La ensalada bastante normal, bien servida pero nada especial. Sin embargo la pasta estaba exquisita y también venía muy bien servida y presentada. El pan de ajo estaba muy rico también, como si lo hicieras en casa. El trato muy amable, algo lento fruto de la inexperiencia desde mi punto de vista. Creo que cuando lleven un poco más de tiempo mejorarán el servicio y la experiencia general. Como extra, la lasagna tiene que ser expectacular porque la pedía todo el mundo, pero cuando llegamos estaba agotada. Tampoco les quedaban gambas para el cocktail. Esto no lo valoro mal en el sentido de que prefiero que se les agote la mercancía y pongan las cosas frescas que te sirvan algo recalentado o mal elaborado. Le daremos otra oportunidad seguro
Débora Cristina Cachoeira Manhães
+5
Gourmet All’italia típico encanto acogedor y fresco de una madre italiana es algo que no puede ser igualado por ningún otro. El sabor de sus comidas es simplemente incomparable, lleno de amor y cuidado, como si cada ingrediente hubiera sido elegido con esmero por ella misma. Y su encanto, oh su encanto, es innegablemente contagioso. Incluso en su regañina más fuerte, siempre hay un toque de dulzura y amor maternal. Una madre italiana es el corazón y alma de la familia, y su presencia en el hogar es lo que lo hace verdaderamente acogedor. Nada puede superar el encanto y frescura de una mamá italiana.
Restaurante muy recomendable si quieres probar platos sabrosos y distintos, la pasta del chef para repetir muy buena. Repetiremos!
La comida tanto la pizza como la ensalada, muy rico, muy bien de precio. Para repetir en este aspecto.
Como pega pondría la lentitud del servicio, tanto en la bebida, comanda, como a la hora de servir la comida.
El carpaccio de salmón está delicioso.
Comimos también pizza y muy ricas. Pero a destacar el carpaccio.
El camarero muy simpático y servicial.
Es agradable llegar a esta pizzería y que te traten de esta manera tan especial que te tratan cada vez que los visitas,en primer lugar la comida en general se nota la materia prima de calidad y el cariño que le ponen a cada plato que sale de esa cocina,y que decir del personal siempre atento y cuidadoso con los clientes,en general un 10 para todo el conjunto que componen este negocio
Probamos diferentes pastas y todas estaban muy ricas, especialmente la carbonara al estilo italiano. Se nota que preparan los platos con ingredientes de calidad y con mucho cariño. El personal es muy amable y atento y, además, el precio es bueno. Sin duda, un sitio para repetir.
La pizzas son muy ricas, aún no hemos probado la pasta, pero pronto lo haremos, seguro que es tan rica como las pizzas.
La chica que nos atendió muy simpática, Las pizzas de 10. Muy buen lugar para comer
Ayer fuimos a cenar y estaba completo, sin embargo, se buscaron una mesita para que pudiesemos cenar, un detalle! A partir de ahí todo fue estupendo, un trato excelente y atento. Las pizzas riquísimas en un entorno acogedor. Muy recomendable!!
Espectacular restaurante, ambiente acogedor, sabores inmejorables, todo lo que pedimos un diez. Personal muy atento.
Nos ha encantado.
La atención de los camareros, la comida muy sabrosa y lo precios son normales. Recomendaremos y volveremos sin duda.
Las pizzas son sabrosas, de las mejores que he probado en la isla. Buen trato y sitio pequeño aunque tienen tres mesas en terraza..
Comimos una pizza y una pasta boloñesa. Todo muy rico. El café en cafetera express como en casa. La atención muy buena tambien. Relación calidad precio muy bien. Repetiremos.
Deberían de probar pizzas saludables ar tesanas y llenas de lo mejor para volver a repetir. Un trato exquisito, profesional y amigable. Gracias, volveré 🍕🍕🍕
Pedimos unas pizzas para llevar. Estupendas, muy ricas, muy recomendables.
En su tarjeta de contacto se lee "podrás comer como en casa". No podía ser más cierto. Pude disfrutar de la cocina italiana más hogareña. Una exquisita carbonara con la receta tradicional, y una crostata deliciosa de mermelada. Para rematar, no podía faltar un café, servido de la manera más hogareña posible, en la cafetera moka, que además pude acompañar con crema de moca. El personal amable y atento. Volveré a por la lasaña y el tiramisú!
La comida espectacular, y el trato inmejorable. Un sitio donde cenar tranquilo y muy acogedor
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