Bueno bonito y muy buen menú.
Los platos muy ricos y muy muy pero que muy bien servidos por su personal que es copioso y muy amable. El único motivo que me haría dudar es que hay demasiado ruido y la insonorización deficiente.
Si vas día que no sea en hora pico o día pico por festivo y no hay mucha gente es un lugar ideal para comer o también para quedarse a dormir
El lugar perfecto si quieres comer bien, equipo muy profesional y la comida muy elaborada y accesible a todos los bolsillos, que no os asusten las estrellas Michelin. Paramos a tomar un tentempié, cansado de un largo viaje y no pudimos elegir mejor, pudimos probar un poco de todo sin gastarnos mucho. El ravioli de manitas de cerdo muy especial, no es el ravioli que esperas jejej, las croquetas muy finas y los fideos de foie.. Para repetir. Servicio rápido y limpio, el personal súper agradable y la comida de rechupete, felicidades!
Intentar valorar la comida de este restaurante sería insultante porque ninguna valoración sería justa. Hemos ido por segunda vez en ocho meses y de nuevo todo ha sido extraordinariamente exquisito. Por ello, me limitaré a valorar otras cosas que son más mundanas: tras la salida de la autovía deberían poner un cartel visible antes del desvío al último camino que lleva al hotel-restaurante. También sería interesante y útil que activaran los cargadores para vehículos eléctricos. Respecto a la cocina, lo dicho, de 10.
Restaurante muy acogedor con un ventanal que invita a sentarte a comer. La comida estupenda y con muy buena presentación.
Muy rico todo. La atención es insuperable.
Un gran equipo de profesionales
Excelente servicio, camareras muy atentas y eficientes. Nos sacaron como aperitivo de cortesía pan con aceite virgen extra y un mousse ahumado de berenjena y anguila que estaba muy bueno.
La comida es de muy buena calidad, espectaculares los huevos rotos con jamón y trufa y los fideos de setas y foie. Además, el lugar tiene mucho encanto.
Para repetir. Hemos cenado fenomenal!
Aurelio Gómez-Miranda del Río
+5
Restaurante de La Fonda de la Estación, un hotel rural de luxe en un edificio del siglo XIX.
Pese a situarse a menos de un km la autovía mudéjar, parece que estás en otro mundo, ya en plena naturaleza, una loma de separa drásticamente del mundanal ruido.
Preciosa sala, con destacable cocina aragonesa, muy actualizada, y con excelente RCP. Yo paro siempre que puedo.
La zona, el local, el buen hacer de sus profesionales y todo en general de 10👍👍❤️
Ciertamente vale la pena hacer un alto en el camino si vas de viaje por la zona o solo de paso por la A23, tendrías que pensar seriamente en entrar y disfrutar de su cocina y ambiente.
Si además tiene la suerte de pasar en temporada de Trufa Negra de Teruel, Tuber Melanosporum, la experiencia gastronómica es brutal.
Recomendable 100%
Eso sí, reserva con anterioridad por si acaso.
Aunque el local es muy grande y en la terraza es un placer disfrutarla, no está de más llamar antes.
Gracias por la fabulosa cena y la grata compañía.
Ya hemos parado unas cuantas veces en este restaurante cuando nos pilla de camino y volveremos sin dudar. Es un lugar muy acogedor, se come muy bien y la atención es de 10. Está pagado a la autovía con lo que no hay que desviarse mucho. Nosotros viajamos con coche eléctrico y valoramos que tengan cargadores en el parking aunque también tienen a disposición los usuarios de Tesla una estación de recarga un poco antes y no está a más de 5min andando del restaurante. Siempre es mejor reservar sobre todo los fines de semana.
Sitio encantador, con atención inmejorable y comida de calidad extraordinaria. Descubrimos este sitio por casualidad en un viaje por el que pasamos por esta zona. Desde entonces es una parada obligatoria. La temperatura marca 34º pero corre una brisa fresca muy agradable para comer en la terraza. Tienen zona de aparcamiento cubierto. Si estás en Teruel o tienes que pasar por esta zona, no te pierdas este restaurante.
No encuentro nada malo que decir. Comida muy buena y raciones majas. Sitio muy acogedor y atención de 10. Comimos un menú del día y muy bien de precio también. Un sitio de los que recomendar sin dudarlo.
Jose Antonio Ramon Portales
+5
Hemos ido bastantes veces mi mujer y yo, recomendadolo a los amigos. Hoy hemos llevado a nuestros dos hijos con sus parejas y ha sido un acierto, como siempre. El personal muy amable y muy atentos. La comida muy bien elaborada, con buenos productos, el menú muy completo y el precio muy equilibrado. Hemos pasado muy buen día y nos hemos ido muy satisfechos. Lo recomiendo.
La atención y la comida muy bien, algunas cosas a pulir, como por ejemplo los helados del menú infantil, y la presentación de la tarta de queso, que la mermelada vulgar sobre el trozo de tarta de queso caliente resta en la elaboración.
Hay tronas para los peques, y quizás los baños de una sola persona se quedan escasos.
También pregunté por la zona de peques y no me supieron decir, luego vi unos columpios.
Buen restaurante donde comer en la A23 Teruel y a un precio muy correcto teniendo en cuenta la calidad del servicio y de los alimentos.
Migas: para mi gusto y conociendo otras opciones cercanas, he echado en falta más acompañamiento (más tropezones) y una uva más sabrosa.
El chuletón muy bueno y bien presentado, pero -para mi gusto- poco sabroso. Las patatas panadera muy ricas.
La torrija con helado, muy buena.
A mejorar: pedí gaseosa y no la tenían fría (el camarero se disculpó); el comedor, al estar lleno, resulta algo ruidoso. La mesa que nos asignaron estaba junto a una pared tapada con una cortina, detrás de la cual había un mecanismo que, cada dos por tres, emitía una especie de chasquido. El tamaño de las mesas para 2 personas resulta algo justo.
Antonio Molina Fernández
+5
Buscando un sitio para comer a mitad de trayecto mi pareja encontró buenas reseñas de este restaurante muy cerca de la autovía. Lo mejor de improvisar es cuando, como el caso que nos ocupa, encuentras un tesoro. La atención desde el primer momento fue estupenda. Fuimos atendidos por Berta y Alba que no dejaban que nos faltara de nada. La carta se compone de un menú a compartir y platos sueltos. A pesar de agradecer un menú de fin de semana nos decantamos por los platos que nos llamaron la atención. Pedimos de entrantes tataki de presa y migas al pastor y como platos principales perdiz en escabeche y secreto de cerdo de Teruel. Mientras esperábamos nos dieron a elegir entre dos tipos de pan, a cual mejor y más crujiente y un poquito de aceite para mojar (nos gustó tanto que compramos una botella de esta cooperativa), además de aperitivo nos pusieron un hummus de berenjena que hizo que acabáramos con las existencias de pan. La sensación general fue que cada plato que ponían era insuperable hasta que llegaba el siguiente. Una pena estar tan lejos porque es posible que esté entre los mejores sitios que hemos probado últimamente
Excelente calidad - precio. Comida muy bien elaborada, y carta variada. Muy buen servicio y muy atento. Sitio muy acogedor. Dispone también de menú infantil. Se encuentra en la Puebla de Valverde cerca de la salida de la autovía mudéjar, y al lado de la vía verde de Ojos Negros - Sagunto. También es una buena opción para almorzar.
Es la segunda vez que vamos. Es un lugar con encanto. El año pasado pernoctamos y este año hemos almorzado. El producto muy rico y bien elaborado y la atención del personal correcta. Relación calidad precio aceptable. Recomendable.
Gran descubrimiento. Íbamos por la autovía y se nos hizo la hora de comer, mirando en el maps me apareció el restaurante y decidimos reservar. Comimos un menú espectacular, todo muy bueno, el trato impecable y el ambiente relajado ideal. Volveremos pronto.
Un lugar con encanto, el servicio muy profesional. La comida muy buena, pedimos menú y no ha defraudado.
Para repetir.
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