Buen servicio, atentos. Las copas de vino relucientes… aunq parezca absurdo este detalle dice mucho. Producto fresco y de calidad. A destacar el rodaballo, en su punto y con mucho sabor. Cuidan mucho los detalles. Para repetir!!
En medio de la tranquilidad más absoluta, un espacio ideal dnd disfrutar muy buena comida. Todo es rico y la atención buenísima. Nos encanta, venimos cada vez que pasamos por Irún .
Absolutamente imprescindible. Ambiente perfecto, producto inmejorable, atención de 10, tranquilidad, calidad y profesionalidad. Pedimos de entrante las almejas a la marinera, si no han sido las mejores que he probado poco les falta. Langostinos gratinados, abiertos en mariposa, con una salsa buenísi
Comida tradicional vasca de altísimo nivel. Gran calidad de servicio y buena carta de vino
De los mejores sitios que he comido. Las alcachofas impresionantes.
Los langostinos riquísimos, el Rape normalito, la Chuleta muy buena. La tarta de queso gratinada, muy rica.
El entorno es agradable y el salón acogedor.
El precio es elevado. La carta está sin I.V.A. y ya te parecen precios inflados
El lugar muy acogedor (chimenea en la sala) y entorno muy agradable.
El servicio muy amable y profesional.
A comentar, la carta en cuanto a carne muy escueta, solo hay chuletón (también de Wagyu) y solomillo.
Justo hoy solo tenían chuletón, muy rico de sabor pero, 55 Euros/Kg nos parece un poco exc
Restaurante en un enclave muy bonito, precios elevados pero todo exquisito y una atención inmejorable, el rape una delicia, el postre gozo borda un descubrimiento. Precio por un tomate aliñado, un rape para 2 y un cogollo de merluza para 2 con agua y un postre 147€.
La comida y el personal inmejorables. Como bien dicen los comentarios, la chuleta y la tarta de queso magníficos. Tomate con sabor de verdad que recogen de su propio huerto. Una experiencia de 10. Volveremos seguro!!
Muy recomendable para comer o cenar. Es un caserío muy agradable, auténtico y la comida es espectacular. Pimientos de Padrón, tortilla, croquetas… el chuletón está buenísimo y el cogote de merluza riquísimo también.
Imprescindible la tarta de queso al horno.
Acudimos porque era de los pocos restaurantes que abren los domingos por la noche. Nos llevamos una grata sorpresa.
Precioso caserio con chimenea en el comedor, todos los detalles muy cuidados. Un lugar tranquilo, para poder comer y conversar.
Personal muy amable y nos aconsejo en todo momento.
Posiblemente la mejor chuleta de mi vida.
Servicio 10
Atención 10
Comida 10
Entorno: 10
Recomendaciones:
Anchoas con pan de semillas
Almejas en salsa verde
Pimientos gratinados
Chuleta
Ensalada
Tarta de Queso
Todo excelente.
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