Un sitio que tienes que visitar sin duda si pasas por Granada ,un entorno rural y muy auténtico ,el cortijo está espectacular ,el personal super amable ,comida muy sencilla pero muy rica y sabrosa. Volvere cada vez que puedo me ha encantado 🥰🥰🥰
Enrique Agredano Ávila
+5
Muy rústico, un lugar bastante diferente que visitar a las afueras de Granada.
A mí juicio abusan un poco de las especias en algunos platos (lomo a feira o las patatas asadas, por ejemplo), pero la calidad general es bastante buena y el precio más que razonable.
Es un sitio acogedor.. se ha hecho popular y suele estar a tope..en plena Vega aprovecha y te das un paseo en bici..por cierto que el carril de Granada te lleva hasta allí prácticamente..te bebes algo y picoteas...y te lo pasas genial con amigos o en pareja.
Javier San Vicente Vicente
+4
Un lugar distinto en la Vega de Granada, una casa tradicional que mantiene la estética de las antiguas ventas. Una decoración que te retrotrae a otro tiempo. Servicio a veces lento pero correcto, comida casera y muy buen ambiente.
Un lugar encantador, con solera, quizas deberian dar a elegir algo de la tapa porque en concreto las dos veces que he ido no me han gustado. Buen trato.
María Ángeles Díaz Soriano
+5
Sitio variopinto, en medio de la vega rodeado de huerta, encanto especial,comida rica y variada ,hay que ir!
Un lugar muy agradable donde echar las noches de verano. Las raciones y las tapillas riquísimas. Los atardeceres espectaculares.
En mi experiencia la comida siempre ha estado magnífica al igual que el servicio y l selección de música
El sitio es muy bonito. Un cortijo con un patio dentro con mesas y sillas. Se encuentra en mitad De la Vega de Granada. Por poner una pega, muchas raciones son elaboradas de la misma forma, mucho pimentón y sal. Aún así, lo recomiendo.
Lugar pintoresco y acogedor en medio de la Vega de Granada. Las tapas que ponen son todas en frío. Carta para raciones algo exigua con algunos platos calientes de microondas. Creo que es uno de los sitios que, o te gusta mucho o no te gusta nada.
Sitio pintoresco en el corazón de la Vega granadina donde relajarse con un vino del terreno y buena cerveza rodeado de cultivos de maíz y tabaco, acequias y ambiente fresco vegueño. Tapas y raciones peculiares de especialidades propias de la tierra. Muy recomendable para ir solo o acompañado y en familia. Acceso por camino de tierra. Fácil aparcamiento pasado el establecimiento. Personal muy agradable y eficiente. Preferible solicitar reserva en temporada estival.
En mitad de la vega, es un bar que se ha puesto de moda y no es de extrañar. Lo mejor de todo es el ambiente y la cercanía del servicio. Si vais no dejéis de pediros una ración de Tomate aliñado. A los que seáis sensibles a los olores.. os advierto de que en alguna ocasión la acequia que pasa cercana huele un poco. Es el encanto de estar en mitad del campo!
Uno de los lugares con más encanto de granada. Situado en plena Vega granaina, su acogedor salón te atrapa, con su chimenea en invierno y con su pequeña terraza en verano. Lucen sus platos muy de la vega, de la gastronomía del lugar. Creo que es uno de mis lugares favoritos. Llamar primero que los fines de semana suelen estar a tope.
A un paso de granada para desconectar de turistas, la comida muy buena, salmorejo bueno y verduras en su punto, todo rico y el cortijo limpio y acogedor. Un sitio de los de toda la vida y por ello tiene su encanto, echo de menos mas amabilidad por parte de las camareras.
Cortijo antiguo donde el buen comer se junta con el disfrute de estar en la vega granadina. El verano se puede disfrutar de un respiro con el ambiente de regadío de la vega, y en invierno le da un toque especial la chimienea. Con patio interior.
Me encanta la morcilla con tomate, y los platos de verdura se saborea realmente la verdura.
Si es fin de semana es recomendable reservar mesa.
Advertencia, si no les gustan los gatos, le resultará incomodo. Hay varios y están libremente entrando y saliendo del lugar, son muy sociables y quizás los tengan como compañeros de velada.
El mejor sitio para guarecerse de las tormentas: rústico y acogedor, con una excelente banda sonora, entrañable trato y muy buena comida con interesantes sabores. Nos encantó la ensalada de cous cous, el melón aliñado y el lomo. Todo presentado con cariño, servido a tiempo y regado con un clarete del terreno.
Aconsejable 100%
El sitio es una casa antigua en mitad de la vega perfecta para desconectar del bullicio de la ciudad. Personal amable. Le pongo un cuatro porque las tapas son un poco deficientes para mi gusto. Si mejoraran esto ganarían mucho.
Lugar pintoresco perfecto para tomar algo y tapear por la Vega de Granada. Buen servicio. Poca variedad de platos. Patio interior y chimenea en el salón.
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