Es una taberna típica de aquí de Granada. Es pequeñita y está situada frente a uno de los laterales de la catedral.
Es barata y te ponen tapa con cada consumición. Las tapas son contundentes y el pescaito frito está de muerte (de los mejores sitios donde lo hacen).
Por poner un pero diría que la primera tapa, las tortitas de calamares, las omitiría, ya que no están muy buenas, hechas desde mediodía y están blandas. Sin embargo, todas las demás están de vicio.
Además las raciones son contundentes y de calidad.
Para tres pedimos: gambas fritas; croqueta (croquetón) de rabo de toro y de puchero, estaban riquísimas; mollejas de cordero, no podían estar más buenas y sabrosas.
De tapas nos pusieron: tiritas de camarones, boquerones fritos, cazón en adobo y salmorejo, este último estaba EXQUISITO!!
Para terminar nos pusieron unos bartolillos.
Volveremos SIEMPRE.
Que decir... Entramos a tomar una cervecica y desde el primer momento el trato fenomenal, cercano y amigable. Estaba todo lleno y nos habilitaron una mesa para comer. Los camareros superior, sobre todo Johnny, nos pusimos en sus manos, que como es paisano, nos recomendó de categoría, aunque lo hace con todos, de principio a fin genial. Volveremos, muy recomendable.
Tuvimos que felicitar al cocinero personalmente, estuvo muy agradecido y amable.
Dolores Fuertes De Barriga
+5
Fuy recomendado por un compañero de trabajo y la verdad que ha sido todo un gran descubrimiento, la calidad en todo lo que probamos es excelente, la atención maravillosa y la un muy buen ambiente, precio muy bueno, más que recomendable
Bar muy correcto y servicio profesional de camareros con cerveza muy bien tirada.
Volveré en otra ocasión para comer en zona de restaurante.
Taberna pequeña con muy buena comida y de calidad. Me encanta los boquerones y la lionesa de salmón ahumado.
El salón comedor tiene encanto y mantiene su esencia. El camarero que nos ha atendido muy agradable y simpático. Y la comida muy buena. La ensalada que hemos pedido espectacular, nos ha encantado.
Xema González Carmona (Xemoso)
+5
Bendita casualidad. Empezó a llover y nos metimos este bar, ¡qué bar!
De los de siempre, su encanto y pequeñez, su alegría y buen servicio. Todo esto siempre acompañado de una cerveza bien fría, de buena variedad de vinos y de excelentes tapas.
Estuvimos 3 días en Granada y fuimos TODOS los días, esto lo dice todo.
Buenísimo, nos lo recomendaron y fue todo un acierto. Comimos solo con las tapas que nos sacaron con las cañas. Tortitas de camarón, arroz y pescado rebozado. Un lugar autentico a los pies de la catedral que por fuera pasa desapercibido y por dentro parece que se ha parado el tiempo. Recomendable si queréis tapear bien.
El servicio me pareció muy correcto, amables y rápidos. La calidad de los platos muy alta, recomiendo las alcachofas especialmente, de lo mejor que he probado. Las carnes y el atún muy bien hechas. El churrasco tierno y sabroso, el su justo punto. El precio es estándar de la zona. Sin duda volveré.
Primera vez que fui y salí contenta. Super baratas, y tapas ricas. También tienes unos croquetones muy ricos. Lo malo es que tiene un horario muy reducido y hay que ir pronto porque se llena. Por lo demás genial, son muy rápidos. Volveré.
Lo mejor y más auténtico de la zona. Tanto para ir de tapas como para comer. Es un bar con mucho encanto amables en el trato la comida súper buena, fritura de pescado espectacular. Os recomiendo los boquerones, y como postre los Bartolillos
Tapas excelentes con la bebida
Precios asequibles
Trato inmejorable
Local a los pies de la Catedral de Granada, con muy buen ambiente familiar
Lugar típico de cañas con mucho ambiente. El camarero tirando cañas y pendiente de todos un crack! Sólo hemos estado en barra, muy concurrido.
Bravo a Miguel Bravo, a su nuero y a todo el equipo!! Comida espectacular, casera y deliciosa, servicio impecable! Hemos ido a mediodía y no hemos podido resistir volver a la noche a seguir degustando sus deliciosos platos! Gracias de corazón!
Comi al pie de la torre hace 20 años.... he vuelto a granada y repetí porque aun me acordaba de lo bien que comimos. Sigue siendo igual de buena !. Magnifica comida, trato del personal y precio.
El servicio es muy bueno, la carta algo escasa, el pescado muy bueno, muy recomendable los boquerones, pero la carne, en este caso entrecot, mejorable en calidad. El precio es moderado.. fuimos con niños y les gustó salvo lo comentado con la carne.. volveremos
Muy buen servicio y todo muy bueno. El camarero tuvo un detalle y nos trajo unos dulces de postre. Y sobretodo muy buen precio. Super recomendable!
Tapitas de cortesía muy ricas, raciones buenas y abundantes, a destacar las pavías y la croqueta de morcilla espectacular, muy buena atención y detalle dulce para terminar, cuando volvamos a Granada será visita obligada!
María José Paredes Reyes
+5
Un gran lugar para comer tranquilos, familiar, un trato excelente, lleno de tradición a un precio asequible.
De visitantes de Santander, Vitoria y Cádiz, mil gracias, por vuestra amabilisima atención.
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