Café tanto frío como caliente en el punto. El lugar muy lindo. Tiene vistas al río Onyar. Y dentro es súper lindo/chulo. La señorita que atiende y hace el café es muy querida y amable. Me queda probar la merengada oreo. Esta en toda la Rambla Libertat. Tomás el Puente Eiffel y vas a mano derecha y l
Cafetería de especialidad en una calle comercial del centro de Girona. Situada en el interior de un edificio modernista, por dentro tiene una decoración industrial con ladrillo visto.
A la hora a la que voy el sitio está bastante lleno aunque queda alguna mesa libre. Al fondo hay unas ventanas que
Estábamos buscando una cafetería para refugiarnos del tremendo calor que hacía y tuvimos suerte al encontranos está.
Cafetería nueva, de estilo moderno, con un servicio mega atento y agradable.
Entré con la idea de tomar café y al final me fijé en el Açaí, pregunté y cuando me informaron sin duda
El lugar es super bonito con vistas al río, café increíble y unos açais para morirse! De hecho es el único sitio en Girona donde puedes comer. Muchas opciones veganas, puedes sustituir la leche de los cafés/tes/smoothies por leche vegetal y la tostada de aguacate y la de mantequilla de cacahuete est
Un café precioso. Hay mesas con vista al río. Calidad decoración. Muy caro para desayunar o comer liviano.
Fuimos dos veces y la verdad que todo muy bueno, el café es muy rico. Comimos el croisant relleno y una bocata los dos calientes y tostados, sin duda la próxima vez que volvamos iremos ahí. Excelente
Un sitio acogedor y con vistas al río. La atención correcta por parte de las chicas. El bowl de açai estaba increíble y el chai latte con leche de soja también. Tiene una carta muy variada.
Es un sitio muy agradable, para descansar y tomarse un café mientras se pasea por la ciudad
Lugar con encanto y buen café. Perfecto para hacer brunch.
No solo tienes granos especiales dedicados a los coffee lovers, como tambien posuen el altentico açaí brasileño. Increíble!
Un lugar situado en la Rambla de Girona, justo al lado del río. Es un lugar pequeño pero acogedor con mesas dentro y fuera y con vistas al río. Es un buen sitio para ir a desayunar de vez en cuando aunque no siempre ya que es caro por sus raciones. La carta es muy variada, desde bollería hasta tazon
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