Hoy hemos venido a comer sobre las 13:30, que cerraban 14:30 ponía en internet (que me parece genial que esté abierto un Domingo), aunque ya eran las 14:55 cuando hemos pagado, así que supongo que alargan hasta que se van todos jajaja
El recibimiento muy cercano y familiar, nos hemos sentado en las mesas de atras que ves todo el trozo de "jardín", que no se ve igual desde las mesas de la entrada, ha sido genial.
De tapas me he pedido unas croquetas de pollo y un bikini , buenísimo todo, le he pedido ketchup a la camarera y me ha traido un bote de kétchup cómo dios manda, q en otros sitios pides ketchup y traen sobrecitos...lo he agradecido mucho la verdad
Mi chico ha pedido la hamburguesa pepe que iba bien cargada y él ya la había probado anteriormente por eso su elección ha sido un acierto seguro, también se ha pedido una copa de vino sin necesidad de pedir la botella entera, eso también está genial!
Luego postres, la carta de postres es muy extensa, hay mucha variedad,es un librito con postres helados y también habia coulant, pero nos hemos pedido un par de helados de cono y tipo magnum.
Me he quedado loquisima que mi agua solo costará 1€, nivel precio de toda la comida le doy un 10! Estaba buenísimo todo y hemos comido dos personas x casi 30€, 15€ x persona aprox, súper bien!!
Repetimos fijo🥳
Sehr freundliches Team, absolut leckere Speisen mit viel Liebe in traumhafter Umgebung gekocht. Wir kommen wieder! Die Kinder haben eine eigene Spielecke und die Besitzer sind absolut kinderlieb. Fünf Sterne! 😍
(Traducido por Google)
Equipo muy amable, comida absolutamente deliciosa cocinada con mucho amor en un ambiente fantástico. ¡Volveremos! Los niños tienen su propia zona de juegos y a los propietarios les encantan los niños. ¡Cinco estrellas! 😍
Gemma Bembibre Iturbide
+5
Hacía tiempo que buscaba un restaurante así. Carta sencilla pero que llega a todos los gustos. Patatas caseras y carne a la brasa. Pero para mi, lo mejor sin duda, el jardín.
Tienen un jardín muy grande con mesas donde se puede cenar. Nosotros fuimos un mediodía, que no suelen usar esa zona para comer ya que hace mucho sol, pero se lo pedimos (había un sitio con sombra) y no tuvieron ningún problema en prepararnos allí la mesa.
Al ser una zona con jardín, los más pequeños pueden estar por el césped gateando sin hacerse daño en un terreno blandito y sin peligros. Para niños más mayores hay una caseta, cabaña, con juegos y pinturas para poder jugar a lo que quieran. Un espacio muy bonito.
Por último, la gran atención de los camareros que nos atendieron. GENIALES. Gente joven, bien educados y atentos. Sin duda, volveremos a comer aquí cuando pasamos por la zona.
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