Comimos en la terraza ya que íbamos con el perro y llovía, comimos muy bien. Había menú bastante abundante por lo que vimos pero decidimos pedir pulpo que estaba espectacular. La camarera muy amable se ofreció a darme un pincho para el perro también
Restaurante con un salón en la planta de arriba que tiene vistas al puerto.
La parrillada de pescado muy buena.
La camarera que nos atendió hizo todo lo posible para que estuviéramos agusto, pero la cocina iba bastante lenta y estaba sola para todo el salón.
Precioso restaurante al lado del puerto, personal muy amable, pedimos una paella y mientras esperamos nos trajeron una tapa de pastel de cabracho,estaba todo muy bueno, realmente recomendable,sin duda alguna repetiremos
An error has occurred! Please try again in a few minutes