5 Estrellas. Que más puedo decir. Estaba todo muy bueno y adecuado para su precio. Aún siendo 16 personas, tardaron un par de minutos en servirnos la comida. El plato muy bien presentado y el personal muy amable. Enhorabuena.
En pleno corazón del Parque Natural de los Arribes del Duero, se halla el guapo pueblo de Fermoselle, conocido como el Balcón del Duero o el pueblo de las "mil bodegas"... por su gran historia vinculados. Lugar de bellos paisajes y buena gastronomía, donde uno de los referentes es el Restaurante M
La amabilidad, los platos riquísimos, el vino y el entorno inmejorable .
Volveremos. La verdad que da gustó parar en sitios así . Gracias
Fenomenal atención y agradable terraza interior al anochecer se pone concurrido. Increíble el chorizó campeón del mundo, riquísima la tabla de embutidos.
Un gran sitio para una gran villa como es Fermoselle, hemos comido un chuletón y una paletilla regado con un buen vino del pueblo.
Si volvemos por aquí, que volveremos, será cita obligada comer aquí!
Sitio acogedor y amplio con 2 comedores ,buen servicio y rápido ,comida muy rica y abundante la tarta de queso espectacular 🙌🙌
de entrada pedimos una ensalada de tomate. Era un autentico espectáculo, tomate de verdad, del rico rico. De segundo pedimos un solomillo que era como mantequilla, super tierno y bacalao, como no en la zona muy lindante a Portugal el bacalao era para llorar de rico, se saltaban las lagrimas. Por rec
Es un bar con buena barra de pinchos, que arriba tiene restaurante con un comedor en el que caben unas 30 personas.
Está en plena Plaza Mayor de Fermoselle, y ofrece una carta amplia y variada en la que destacan las carnes a la brasa.
Muy buen trato y un sitio agradable con una calidad-precio muy co
Se encuentra en una zona buena, el casco historico de Fermoselle.
La carta bastante amplia y buenos precios.
Respetan muy bien la materia prima, una cocina tradicional.
La atencion perfecta, la camarera supermaja.
Nos invitaron al cafe y unos chupitos.
La decoracion bastante interesante, cosas antig
Restaurante en plena plaza mayor de Fermoselle. Posee una agradable terraza. Pedimos patatas revueltas, tabla ibéricos, cardos y un chuletón para cuatro. Las patatas parecidas a unas revolconas pero con un ingrediente distinto, unto (grasa un poco rancia), que las daba un sabor muy bueno. Los cardos
Normalmente pido la tapa del plato de jamón.
De cena el comedor es pequeño, las carnes a la brasa están bien y más acompañadas de un vino de la denominación de origen Arribes del Duero.
Buena relación calidad-precio
Nuestra segunda visita y digo segunda, por que nuestra visita del año pasado, fue tan satisfactoria que nos obligó a volver. Una magnífica atención, excelentes materiales y precios comedidos hacen un placer el volver por aquí. Déjate aconsejar y disfrutarás aún más, y puedes seguir sus recomendacion
Muy buen servicio y calidad de producto. Tradicional. Muy generosas las cantidades. Relacion precio calidad .muy buena. Lugar pintoresco.
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