Opiniones Restaurante La Peña

Un valor seguro en El Campello y Alicante, producto de calidad (hay que pagarlo) y servicio profesional, sabiendo del producto y recomendando aquello que su experiencia les otorga el conocimiento. Magníficos salmonetes y coca de verdura. El vino por copas subió un poco el precio, si hubiésemos pedido la botella habría sido más económico. Valió la pena.

Nuestro favorito de Campello. Hoy hemos tomado una ensaladilla de quisquilla, unas gambas rojas a la plancha impresionantes y arroz de atún verduras delicioso. Muy recomendable

Siempre pedimos arroz aquí porque nos encanta pero hoy nos hemos animado con la fideua del señoret y ha sido todo un acierto. Repetiremos!

Producto de calidad y servicio atento, disfruté mucho. El arroz en su punto perfecto.

Un clásico de Campello que yo desconocía . La calidad buena, tomamos el menú que incluía marisco de entrantes, arroz del señoret y pescado, todo muy bueno. Le quito una estrella porque tuvimos que elegir entre diferentes menús, todos sobre los 50€ o por encima. Considero un error que condicionen o limiten la elección a unos menús obligando a los cuatro comensales a tomar el mismo en la mayoría de los casos o permitiendo un cambio en algún menú.

Un clásico en Campello. Destaca por su calidad de producto, cocina tradicional deliciosa y trato familiar. Imperdible para comer buen marisco, pescados y exquisitos arroces.

Comida mediterránea con pescado de los puertos cercanos, el de El Campello apenas a dos centenares de metros, y especialmente del de Santa Pola. Todo muy sabroso, desde las almendras iniciales de Jijona, pasando por los tomates de Muchamiel, la quisquilla de Santa Pola, el pulpo de El Campello, pescados variados, arroces para deleitarse y postres de elaboración propia. Abierto desde 1981. Es uno de los restaurantes de la Costa Blanca más recomendables y que hay que visitar al menos una vez. Familiar. Ahora en manos de la segunda generación: Nuria y Germán, son los que han recogido el testigo de su madre, Dolores -Lola-, y de su padre, Germán. Y se han volcado en este proyecto para seguir llevando la buena cocina mediterránea a los paladares de las personas que aprecian el incomparable sabor del mejor marisco y del mejor pescado de bahía, todo fresco, grandes arroces y otros platos para disfrutar intensamente. Sin olvidar los postres, ni la excelente carta de vinos, y muchos detalles propios de un restaurante que sigue siendo especial. En mi caso unido a grandes recuerdos y momentos emotivos, íntimos, compartidos con personas muy queridas. Recordando también una cena que se convirtió en la despedida de una persona maravillosa que poco después nos dejaría por una enfermedad pese a su hermosa juventud. Recuerdos que me hacen volver para degustar de nuevo la propia vida, que es en esencia lo que ofrece la buena cocina -retazos inolvidables- con la alegría de compartirlos de nuevo, sin olvidar a quienes nos han dejado y que siguen en nuestros corazones.

Fuimos para una comida familiar. La comida fue excelente, muy recomendable la fideuá. El servicio excepcional, muy atentos. El interior del restaurante está ambientado en el interior de un barco y crea una atmósfera ideal para una tarde de fin de semana. Totalmente recomendable.

Fuimos para una comida familiar y nos encantó. Como éramos muchos pedimos dos tipos de arroz y fideuá. Estaba todo buenísimo pero yo me quedaría con el arroz de atún y verduras y la fideuá de fino del señoret. De postre la tarta de limón muy rica. El ritmo de la comida fue muy bueno y el servicio atento aún estando a tope. Recomendable