MARAVILLOSO LUGAR. Encontramos el sitio por casualidad mirando reseñas y cartas. No lo conocíamos y fue un descubrimiento.
Primero de todo agradecer el trato y el servicio a la camarera, muy profesional y muy agradable.
En segundo lugar el sitio esta muy cuidado y es muy bonito.
Por último, la comida es extraordinaria con una gran calidad y el precio no es nada caro. No sé qué destacar porque fue todo perfecto. La guinda para este perfecto pastel es que admiten mascotas.
Jeronimo Lozano Barrante
+5
Hemos comido el menú y nos a gustado todo mucho, el servicio a sido un poco lento, pero pensando que el restaurante estaba lleno pues se lo podemos perdonar. Sin duda volvería a comer allí
Bonito restaurante asador en la parte alta de cuenca. Comida muy rica y muy bien servida. El servicio muy amable. La camarera nos atendió muy bien y el dueño hizo muy bien de anfitrión (se decepcionó un poco al ver que necesitan promocionar más la denominación de origen del agua Solan de Cabras,😅😅😅). Muy recomendable. Acceso para personas con movilidad reducida. Precio por persona 25-30€.
beatriz figueroa perez
+5
Tras retrasar nuestra reserva por nuestra propia responsabilidad una y otra vez, nos la cambiaron sin problema.
Pedimos hamburguesa de gamo, arroz negro con ali oli (nada que envidiar a un arroz en Alicante) y los postres de lujo. El café bien hecho. Recomendable 100%.
Raquel Fenollosa Santofimia
+5
Restaurante muy agradable y con una relación calidad precio excepcional. Recomiendo los huevos con patatas y trufa y el ciervo con salsa de frutos rojos, que estaba muy jugoso. El servicio muy amable y atento.
El morteruelo está francamente espectacular. Después de volver a probarlo tras años, me llevó a mi infancia en el que mi abuela lo hacía en ocasiones especiales. Todo estaba bueno y fueron muy atentos.
Muy buen sitio en la zona alta de Cuenca. Vengo todos los años a celebrar mi aniversario. Muy buena la comida, sobre la ensalada de queso de cabra y los postres caseros, son para repetir. Tiene terraza para el verano. Calidad/precio muy buena
Guillermo Davó López, Cruncher
+5
Recomendable al 100%, una cocina muy chula y el ambiente es fantastico.
Bien en general.
Trato agradable en todo momento.
Carta sugerente y con buena selección de platos y materias primas.
Muy bonitas vistas en la zona de terraza.
Nos encantaron los Rocher de morcilla y el queso frito con mermelada de pimiento, el arroz (negro con sepia y alioli) estaba bien pero le faltaba algo de carácter.
Los fines de semana y fiestas conviene reservar.
Sitio muy recomendable para comer en Cuenca. La comida exquisita, el trato de la camarera un lujo. Nos admitieron a nuestro perro!! Una maravilla!!! Un 10 sin lugar a dudas y lo mejor que no es nada caro!
Aunque tardaron un poco en atendernos, luego la comida estuvo muy buena y no tuvimos que esperar mucho una vez tomaron nota.
El sitio es espectacular, esta casi en lo más alto de Cuenca y hay unas vistas muy chulas.
En cuanto a la comida, todo está riquísimo. Probamos los ferreros de morcilla, el ajoarriero, las chuletas de lechal y el chuletón de ternera, y todo estuvo especialmente bueno, con una presentación bastante cuidada. Los precios aunque son algo elevados, van de acuerdo a la calidad de los productos.
Recomiendo ir, aunque hay que reservar con bastante antelación.
Restaurante con una decoración muy bonita, comida de calidad y servicio correcto. La ubicación es muy buena, en el castillo, con unas vistas impresionantes a la ciudad. Además, tiene un parking público gratuito al lado. Todo lo que probamos estaba buenísimo. Nos gustó un poco menos el arroz, aunque es cuestión de gustos. Muuuy recomendable la carne y los Ferrero de Morcilla. El precio está ajustado a la calidad y elaboración de la comida, que está muy bien presentada. La atención de las camareras fue correcta y el tiempo de espera más bien breve. Recomiendo reservar con antelación. En resumen, un restaurante para comer bien.
Pese a que reservamos en el ventanal o terraza, nos metieron inicialmente en la mesa del final del comedor. Al pedir el cambio a terraza, me indicaron que estaba todo ocupado, pero finalmente lo hicieron tras indicarles que lo había solicitado. Estando fuera vimos como a mucha gente que llegaba sin reserva se le ofrecía estar en la terraza, por lo que nos sentimos un poco engañados con el trato, ya que esas mesas se encontraban libres...
En servicio del camarero de la terraza durante la comida fue correcto. La comida de buena calidad, tanto el morteruelo, como los Ferrero de morcilla y la carrillada.
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