Fuimos 10 personas. Todo rápido y fluido. Cantidad y calidad de la comida buena. Los camareros profesionales. El gerente amable y pendiente de todo. Tiene una terraza para comer muy agradable con un árbol muy grande que da sombra y bajo techo también por si llueve. Recomendable
Hemos vuelto por aquí después de unos años y siguen igual de bien. Excelente relación calidad precio. Muy buen servicio. El local nos gusta mucho, sobre todo la terraza bajo los árboles. Un lugar donde comer excelentemente en un ambiente natural y sin florituras superfluas. Muy buena carta; por ejem
El servicio correcto, nos atendieron rápido pero si es verdad que estábamos nada más abrir.
Las fabes con almejas deliciosas, patata rellena muy normal, calamares en su tinta buenos pero no espectaculares y nos decepciono el rollo de bonito, bastante normal.
Arroz con leche muy rico.
Todo el personal muy simpáticos agradables y rápidos . Un lugar con ambiente increíble haya bullicio o no . Comida estupenda (Recomiendo los chipirones) merluza en salsa no estaba mal ensalada fresquita y de la zona carne asada con muchas papas pero buena . Volveremos
Sigue siendo un sitio muy agradable, un merendero asturiano de toda la vida. La comida está razonablemente bien, para el precio. La pena es que, hace años, hacían el mejor rollo de bonito del mundo. He tratado varias veces de volver a comer aquel rollo insuperable pero, en los últimos años, el roll
Relación precio, cantidad y calidad es correcta. Recomiendo lo siguiente porque nos ha gustado mucho, calamares fritos, calamares en tinta, rollo bonito y patatas rellenas. Volveré para probar más. El servicio muy bien. Lo único que no me gustó fue el pan de barra tipo baguette. Por lo demás con gan
Merendero donde comer comida asturiana de calidad en un entorno relajado y con encanto.
La tabla de quesos asturianos espectaculares, muy recomendable. Realmente todo lo probado riquísimo. Tarta de turrón imprescindible diría yo.
Hay mucho personal así que aunque esté lleno el servicio va fluido.
Paramos a comer y nos atendieron sin pedir cita . El jardín es muy bonito . Todos los platos estaban buenísimos . Las croquetas , los calamares , los postres geniales. El personal es super atento y amable . Recomendado
Si hace bueno, la terraza es un sitio formidable para comer bajo los árboles, no obstante sino tiene unos tejadillos que dan al patio también con encanto. Los calamares en su tinta y las patatas rellenas no se pueden dejar de probar.
Fuimos al museo de los dinerarios y después a este restaurante por recomendación de un amigo asturiano. Comimos de maravilla, todo buenísimo y el personal que nos atendió fue encantador. Recomendable 100%
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