Un restaurante auténtico, con pellizco nostálgico (¡ay, esas fotos de Nando Blas en las paredes) y vajilla de Sargadelos.
Las croquetas de marisco no me gustaron mucho, pero la caldeirada de merluza era riquísima, muy mariñeira, y el salpicón de bonito ESPECTACULAR. Tanto que repetimos, aunque se nos quedó en el tintero probar el escabeche, también casero. Así ya tenemos excusa para volver pronto.
La atención de sala muy amable y solícita. Raciones muy generosas.
Verdaderamente, un lugar con alma. Una experiencia cálida más allá de lo gastronómico.
Bonito lugar, tranquilo, sencillo, bien atendido, para disfrutar de una buena conversación en torno a la mesa.
Mobiliario sencillo, así como la vajilla y demás. Pedimos las croquetas de marisco, buenas de sabor aunque un pelín mazacote, para mí con exceso de harina. Seguimos con pimientos de padrón, súper abundante la ración y bien ricos que estaban, y terminamos con bonito con tomate, servido con patata cocida y verduras asadas. De postre tarta de queso, brutal, y arroz con leche más brutal aún.
Cafés y dos rondas de Estrella Galicia
Total 74€
Una joya, cocina realmente buena, materias primas muy cuidadas y un servicio impecable. Tenéis que probarlo.
Un sitio muy recomendable.
El personal muy amable, atento y servicial.
El local, un antiguo almacén de "coloniales" reformado con mucho gusto.
Fácil acceso y práctico para aparcar.
La comida, 10 sobre 10. Felicitaciones para el chef. La caldeirada de merluza estaba para chuparse los dedos y la tarta de galletas idem.
Volveremos!
Buen restaurante. Comida muy rica. Pedimos bonito y pimientos. También croquetas que no son la maravilla. De postre requesón también muy bueno. Trato y servicio muy bueno.
Fui a comer aprovechando que celebran las jornadas de caza. La media perdiz en una maravillosa salsa mariñana exquisita
Pintoresco, construido sobre antiguo molino, cerca de la fábrica de Sargadelos y al lado de la ruta corta de Los enamorados. Se come fenomenal. Aparte del salón tiene una pequeña terraza trasera al borde del río Xunco.
Torrada de pan buenisimas
Ambiente tranquilo y ameno
Restaurante de calidad, tanto en productos como en trato. Impresionantes platos, un pescado de categoría y unos postres de vicio. La caldeirada mariñana de libro.
Económico y muy agradable
Sólo lo he visitado una vez y me gustó. Restaurante elegante y bien montado, casa de piedra con chimenea, espacio entre las mesas. Buena calidad. Pastel de bonito espectacular. Relación calidad precio normal, no es barato, estábamos en agosto.
Vicente Leandro Farre Mel
+5
Buen servicio y un trato muy bueno y un lugar estupendo
Gran sitio, fuimos hace años con 3 bebés. Dueños muy acogedores, se duerme y se come de lujo, y el entorno precioso. Familiar, auténtico, sin pretensiones, gallego. Me encanta.
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