Opiniones El Kiosco Del Naval

A veces es difícil darse cuenta del momento exacto en el que la apertura de un local cambia la tendencia entera de un barrio o una zona, y creo que es justo lo que ha pasado con la apertura del “Kisoko del Naval” El parque de los juncos estaba abandonado, daba miedo pasar cuando se hacía de noche y los locales que abrían no funcionaban. Hasta que abrió este kiosko. De nombre muy acertado, haciendo referencia al histórico equipo que jugaba en el campo que había tiempo atrás en la zona que ahora ocupa el kiosko. Estos pequeños guiños son los que hacen que no olvidemos nuestra historia. El diseño del local es moderno pero integrado en la zona, decorado con mucho gusto y apostando de verdad por el parque de los juncos. Desde su apertura, ha vuelto la vida, la gente, los niños y el ambiente a la zona, todo ha mejorado. Para desayunos tienen buen café y tostadas de diferentes tipos(la inglesa mi favorita), y para comer/cenar especialidades de la zona a una buena relación calidad precio. Hace poco estuve en una celebración más grande y reservan la zona de atrás, donde se está de maravilla y donde nos trataron estupendamente. Además, suelen hacer conciertos y poner barras en fechas señaladas. En resumen, le han devuelto el esplendor al parque de los juncos.

Desde que abrieron,los sigo en redes y sabía que tenía que ir!!! Me gusta la gestión del sitio y la carta me encanta!!! Decidimos ir este Domingo a tomar un aperitivo..pero no fue uno,nos quedamos allí a comer y de lujo!!!!la carta es muy interesante,calidad del producto y a muy buen precio!! Tanto los dueños como el servicio espectacular!!!el servicio rápido aún lleno hasta arriba que estaba de gente. Hemos probado casi de todo,y nos a recomendado y un acierto !!!! volveremos para probar el resto de cosas🙃 Por cierto el café de diez!!por fin alguien que entiende de cafe Hacía falta un sitio así en Cartagena por fin Enhorabuena a todo el equipo!!!volveremos😎,seguid asi

Ensaladilla mixta riquísima, al igual que patatas Terrer. Muy bien presentadas. Porqué no incorporáis churros para desayunar los fines de semana? Y, no me parece normal que no nos podamos sentar tres personas en los sillones del lateral con la terraza llena porque es para grupos. Si no hay ninguno!! El camarero muy amablemente nos echó de allí. Gracias a que cuando nos íbamos una mesa quedó libre.

Un lugar para ir a cualquier hora, bien ubicado y con buen ambiente. Sólo probé el café Asiático y me pareció espectacular, de hecho se acercó a hablar conmigo uno de los encargados muy majo y me explicó un poco acerca del café. En conclusión repetiré para probar la comida puesto que fuí por primera vez y a media tarde (por eso no puedo valorar la comida) y el sitio requiere repetir, buen servicio y gente maja y el sitio chulo, me gustó.

No es la primera vez que vengo a disfrutar de una cerveza mientras me como unas aceitunas y otras tapitas con mis hijos en un ambiente agradable. Sin embargo, ayer coincidí con el dueño, y pareció querer acusarme de que iba a montar un picnic en su mesa por el hecho de traer conmigo una botella de agua medio vacía de mi hija y unos gusanitos para compartir la niña con sus amigos en el parque. No se qué de prejuicio habría hecho, ni lo que habrá vivido con otros clientes anteriores, ni porque me molesté en explicarle que yo solo quería tomarme algo en su local y que no iba a acampar allí, así que simplemente me levanté sin ni siquiera pedir y me fui al de al lado, en el que me atendieron perfectamente y sin tonterías. No le importó dejar de ganar 15€ por una estupidez. La cara de las camareras ante la grosería del dueño, todo un poema. Espero que el resto de reseñas sean tan diplomáticas como la mía cuando ocurra algo similar.

Hemos celebrado en familia el día de la Región de Murcia en el Kiosko del NAVAL y ha sido un día espectacular. Comida y concierto. Buen ambiente, buen servicio y la comida bien presentada aunque la carta un poquito escasa. Se echa de menos alguna tapa de paella y patatas fritas para acompañar la hamburguesa (solo hay chips). A destacar lo atenta y simpática que fue la camarera que nos atendió, que nos dijo que se llamaba Isa "la oveja". Muy cercana, resolutiva y agradable. Los conciertos son un acierto. Volveremos seguro.