Terminado el verano se reduce muchísimo la oferta de lugares donde poder comer en Camariñas (en la costa gallega en general). El día que visitamos esa localidad tuvimos la gran suerte de poder disfrutar de un día soleado y cálido y tener la posibilidad de realizar la comida en una terraza con vistas a la ría fue un auténtico placer. La comida rica y a precios asequibles. El servicio regular: amable y voluntarioso pero desbordado (1 solo camarero para atender la terraza), olvidando parte de los pedidos y generando un ritmo muy irregular en el servicio. A pesar de todo, guardaré muy buen recuerdo de este local.
Mejor de lo que esperabamos, al ser la última opción que nos quedaba en Muxía, dada la hora. Zamburiñas muy buenas y ya que todo el mundo pedía sardinas, nosotros también las pedimos. Camareros muy atentos. Relación calidad precio muy correcta teniendo en cuenta resto de restauración de la zona
valentin perez rodriguez
+4
Buena relación calidad precio,camareras con muy buen trato y atención al cliente a pesar de tener todas las mesas llenas y no dar abasto.el pulpo 😋
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