TINGLADO Oyster Bar Boadilla del Monte 4/5
Local situado arriba del todo de la Av. Siglo XXI
Dispuesto en 2 plantas y una terraza no cubierta.
Agradable y tranquilo.
Hicimos un picoteo rápido antes de ir al concierto de Camela
Aperitivo de la casa: Gazpacho
Anchoas del Cantábrico
La ensaladilla de mi madre
Croquetitas caseras de jamón ibérico
Steak Tartar sobre limas
Baños arriba a la derecha, comunes, con varios lavabos centrales. Decoración curiosa. Bien dotados. 4/5
Hay un baño para minusválidos en la planta baja.
Marco Antonio Pérez Castillo
+5
Fuimos a cenar en pareja. Era lunes y este es uno de los pocos restaurantes que abren esa noche en nuestro pueblo. Desde el principio nos gustó el ambiente que tienen en el local. A la hora de pedir nos dejamos aconsejar por el camarero, un portento de educación y simpatía. La comida es excelente, muy elaborada y con mezclas de sabor realmente sorprendentes. Eso sí, agradecimos no llevar a los niños pues seguramente eran platos muy complicados para ellos. Destacó el carpaccio de cigala y los tacos de atún picante y de pollo. Rematamos con un solomillo de vaca muy bien presentado. El postre fue la tarta de queso que es realmente excelente como cuentan otras reseñas.
Las cantidades perfectas. Un poco alto de precio, pero el lujo y el cuidado con el que hacen las cosas en este restaurante nos llevó a la conclusión de que no fue caro.
Repetiremos, en pareja, seguro. Nos quedamos con ganas de probar más platos.
Personal muy atento, buena presentación de los platos en cantidades suficientes. Recomendable. Precio medio con vino unos 45 por persona
Local amplio y con bonita decoración. Hemos comido en la terraza muy a gusto. Aunque es caro, la comida es muy buena ;-)
🏢ESPACIO/AMBIENTE: restaurante con una buena terraza cerrada, también tiene espacio dentro y fuera. Ambiente agradable.
⚠️ATENCIÓN/SERVICIO: muy atentos y amables. Sirven rápido y son muy serviciales.
Nos pusieron un gazpacho de entrante gratis por parte de la casa.
🥙COMIDA: fuimos a cenar 4 personas y pedimos varios platos para compartir: las croquetas de jamón serrano, venían varias bolas pequeñas, que de sabor estaban suaves pero sin más, debo decir que esto fue lo que “peor” estuvo, aunque tampoco estaban mal del todo; la ensaladilla rusa, estaba muy buena, venía con ventresca, eche en falta más cantidad; también pedimos la ensalada de tomate, estaba espectacular, la recomiendo, se notaba la calidad del producto; también pedimos el entrecot trinchado, el cual te sirven con unas patatas baby, salsa de boniato y chimichurri, y estaba bien; asimismo, pedimos el nan de langostino y estaba muy muy bueno, se te hace poco, lo recomiendo sin duda. Por último pedimos de poste una tarta de queso que estaba buena pero el precio es excesivo (10€).
⚖️CALIDAD-PRECIO: con respecto a la rcp me parece buena, aunque algunas cosas elevadas de precio, en líneas generales bien. Los cinco platos, el postre, dos botellas de agua y una botella de vino salió por 130€, ósea unos 33€/pp que está bien.
💯NOTA: le ponemos un 7,75.
Siempre que puedo voy. Se come exquisito. La carta es muy variada. El ambiente super agradable!!! Personal muy atento.
Muy muy bien. Comida exquisita, trato inmejorable, ambiente acogedor y cómodo. Los camareros muy pendientes de los clientes. 100% recomendable. Volveremos.
Qué buen ambiente y qué bien se come en este sitio. Es la tercera vez que me dejo caer por allí. Las dos primeras muy de pasada para tomarme una cerveza. En esta tercera cenamos como se merece!! Un montón de opciones para picar y comer estupendamente. El servicio sobresaliente y el sitio es de 10. Buena música y una terraza también digna de mención. Vuelvo en 2 semanas, tal cual!!!
Siempre tengo cierto recelo a los restaurantes de grandes grupos, porque por lo general miman menos tanto el servicio como lo que sirven. Pero en este caso debo decir que cuando vamos al Tinglado es un acierto seguro. También es cierto que casi siempre vamos fuera de las horas punta, porque si tienen algo bueno es que la cocina no cierra, y nos permite comer o cenar en horarios poco habituales y donde el restaurante está menos lleno. Con lo que no puedo hablar de retrasos ni nada, porque los hemos sufrido muy poco.
Me gusta la carta, y de lo que hemos probado, me ha gustado todo. Además puedes comer mientras te tomas un coctel, que si tienes la suerte de que te lo prepare Marco, ya rematas.
Para comer, cenar, picar algo a cualquier hora, o simplemente para ir a tomar algo, es un acierto, y en Boadilla que tampoco tiene tanta oferta como Madrid, más. El personal es muy profesional y tratan de estar siempre atentos, incluso con lo grande que es, que podría resultar caótico, te visitan a la mesa cada poco para saber si está todo a tu gusto. El lugar es muy agradable lleno de plantas y una decoración y música agradables.
Muy recomendables las ostras, la burrata con salmón, el saam de pulpo, y la burguer con "patatas" de boniato.
Nos gustó mucho sitio y la decoración.
Buen trato por parte de los trabajadores y la comida espectacular con bonito emplatado.
Decir que probamos la tarta de queso por ser tan nombrada en las reseñas y quedamos encantados por su sabor y tamaño, para compartir esta genial.
Volveremos sin duda 🫶
Lo mejor sin duda el trato, Cesar nos trata siempre de 10! Grandes profesionales de la hostelería, siempre hacen que sea una gran experiencia!! La comida siempre buenísima!! La tarta árabe insuperable…
Tinglado Oyster bar es un restaurante muy bien decorado, amplio y con buena música, tal vez un poca alta en determinado momento.
Fuimos dos parejas con la idea de picar y tomar copas así que nos dejamos guiar por la recomendación del personal en la selección de los platos a compartir. Empezamos con una botella de Ramón Bilbao, nunca nos deja mal. Para compartir hemos pedido unas alcachofas confitadas que las sirven por unidad, de muy buen sabor y buen tamaño, muy buenas, seguidamente chipirones a la brasa, chistorras de arbizu, entraña de black angus y por últimos aguacate salpicón con salmón. El líneas generales toda la comida estaba muy buena y bien presentada, estilo gourmet es decir de poca cantidad con un precio un poco elevado . Pero si hay que aclarar que de excelente sabor. La carne en su punto y jugosa, los aguacates exquisitos.
En cuanto a la atención al principio nos sentimos un poco abrumados, tildando a sobre atencion o presión para que ordenáramos, luego bajó esa tensión y todo marchó muy bien. Hemos disfrutado del lugar, de la comida y de la compañía.
Miguel Ángel Morente Romero
+4
Sitio para comer raciones en un restaurante con música y bonita decoración. El servicio amable. Pedimos unos chipironcitos con huevo frito y puntilla y aguacate a la brasa con tartar de salmón, ambos muy buenos. Después un saam de pulpo con palomita de kimchi y unos dumplings fritos de gamba roja, estos dos algo mas flojos. También pedimos un wok de pollo y verduritas de corral que no nos gustó. Las raciones quizás un poco escasas para su precio. De postre su tarta de queso si fue un rotundo acierto. Quizás fallamos en los platos elegidos pues vimos salir algunos platos de carne que tenían buena pinta. Le daremos una segunda oportunidad.
El restaurante está bien planteado y muy bien organizado con un personal bastante profesional. La decoración muy acogedora. La carta es breve pero buena y armonizada, con género de calidad. Nosotros hemos ido a cenar y hemos estado muy a gusto. Primero cenamos dentro pero luego tuvimos la oportunidad de tomar una copa en la terraza. Muy buena la experiencia. La tarta de queso espectacular.
Local muy agradable, con una decoración cuidada y buena separación entre mesas. Se agradece el espacio con muchas plantas y grandes cristaleras que se alejan del restaurante típico.
La atención del personal es excelente, siempre atentos a todo detalle, explicando la carta y aconsejando bien sobre que platos pedir y que cantidades. Camareros, cocina y hostess hacen un gran trabajo.
La comida está bastante bien. Pedimos croquetas. De tamaño perfecto para que de un bocado se sienta todo el sabor en boca. Con un profundo aroma a jamón, crujiente perfecto y una lograda melosidad. Se agradece bastante que no abusen de la nuez moscada tan de moda hoy en día en las croquetas. Croquetas de jamón con gran sabor a jamón.
Ensaladilla fresca, con el perfecto toque ácido. Si bien, la ración algo pequeña, bien indicada por el camarero. Queríamos pedir media, y acertamos con su consejo.
De principales: hamburguesa y ensalada de burrata.
Hamburguesa jugosa con buen sabor a carne, queso y salsa que acompaña pero no invade. Pan brioche perfecto que le da un toque dulce.
La ensalada fresca, preparada en mesa con sabrosos tacos de salmón marinado.
Los postres son de alto nivel. Su famosa tarta de queso, con fama merecida. Y su versión del Lemon Pie perfecta para este tiempo caluroso.
Altamente recomendable.
Esperanza Redondo Morales
+5
En este restaurante está todo riquísimo, pidas lo que pidas seguro que te encanta. Es muy acogedor, la planta de arriba tiene unas vistas muy chulas y Roberto, el encargado, es un encanto.
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