Aunque no es un bar ecónomico, merece bastante la pena probar sus deliciosos platillos.
El local es pequeño y aunque la esencia es la de bar de vermuteo y tapas, cenar en los taburetes puede llegar a ser un poco incómodo, sobretodo en las mesas con barricas. Pero para nada eclipsa la gran cocina de este bar:
Muy recomendables los huevos del abuelo, el canelón de foie y las albóndigas.
Si queréis acabar con una excelente sensación, tenéis que probar la tarta de queso casera: flipante.
Patricia Sánchez Delicado
+5
He ido un par de veces a tomar algo, de tapeo y me gusta mucho.
Para mí hacen unas de las mejores bravas de Barcelona. Son del estilo que me encanta: una salsa roja picante y potente de sabor (no sé si llevará ñora, pimiento choricero o similar) y una salsa blanca de allioli. El punto de la patata está perfecto. Crujiente por fuera y bien cocinada por dentro.
La ensaladilla rusa está espectacular. Creo que mi favorita de la ciudad hasta el momento. Me recuerda a la ensaladilla rusa estilo alicantino (o del sur): sin verduras, donde la patata y el atún son protagonistas. Un 10.
Hemos probado también las albóndigas y son realmente muy originales. Están riquísimas.Vienen dos y se pueden tomar de tapa o como plato individual.
Depende de a lo que vayas puedes gastar entre 10-20€ por persona, si es a tapeo, o un poco más si es a cenar. Yo siempre he ido a tapear.
Muy recomendable. Es un sitio que se me hace muy difícil pasar por delante y no pararme a por una bravas rápidas jeje
Hacía tiempo que no salíamos tan entusiasmados de un restaurante.
La carta es cortita y por la noche al menos no hacen tapas. El precio es bastante elevado y las raciones no muy abundantes, pero cuando pruebas la comida entiendes porqué cuesta lo que cuesta.
Pedimos diferentes platillos y la verdad es que nos gustaron muchísimo.
El servicio fue muy amable y atento en todo momento.
La única pega que le encontramos es que el local es pequeñito y las mesas son altas y con taburetes por lo que en términos de comodidad no acabamos de estar del todo bien.
Gastro bar con tapas de mucha calidad y buena oferta de vinos.
Sus bravas son de las mejores de Barcelona y tiene otros platos muy ricos así como una buena variedad de embutidos y conservas de calidad.
Para mi gusto debería mejorar el servicio que en momentos puntuales se satura y baja el nivel.
Una buena ubicación en el barrio de Sant Antoni, puedes escoger entre tapas o el menú del día, todo estaba genial, una esquina muy tranquila, muy buena calidad de embutidos, vermut y todo en general.
No pueden dejar de pasar por aquí.
Gracias “Sant Antoni Gloriós”
Bar-restaurante de tapas, de vermut, de comida o de cena, que presenta una muy buena selección de platos variados y con detalles de alta cocina. Los huevos del abuelo son un imprescindible. El servicio es de alto nivel. Calidad-cantidad-precio muy buena. Recomendado (€€).
Relación calidad precio un poco desigual, pero los dos platitos que probamos nos encantaron, primero el huevo frito y después las bravas. Las segundas realmente riquísimas, de las que te hacen volver solamente por volver a comerlas. El vermut de la casa bien, sin más.
Bar de tapeo con tapas muy buenas y muy elaboradas. Las bravas están muy buenas..el aliioli y la salsa brava están brutalmente buenas... El huevo poche está bastante bueno y las albóndigas ibericas están muy buenas. Trato del personal muy amable y cercano. Aunque el precio es elevado vale la pena por la calidad de esas tapas. Muy recomendable!!
¡Que gran descubrimiento! Hacía tiempo que queríamos ir, y ha sido exactamente lo que me esperaba.
Da gusto disfrutar de un local con tanta solera, unos camareros de diez (¡sois unos cracks!) y unos platillos de rechupete. ¡Que buenos los huevos de l’avi!
Nos faltó probar las bravas (y muchas otras cosas, seguro), pero no me preocupa, como vamos a volver seguro... 😉
Esta bastante bien el lugar, tardan un poco entre los fríos y calientes. Pero bueno, también el bar estaba bastante lleno. Comimos bien, a mí el steak tartar me gustó mucho.
Está bien para picotear algo “diferente”.
Taberna tradicional con toque actual, cuidada decoración y detalles para trasladarte del pasado.
Buena atención a pesar de estar muy concurrida. Excelentes bravas( algo escasas para el precio) diversas cervezas y como apunte diferente una manzanilla muy conseguida.
A ver… es carete y no asumible por todos los bolsillos pero merece muy mucho la pena, por qué? Porque es casero de verdad, porque tratan muy bien el producto y porque saben lo que hacen… quizá a mi opinión y poco más de sazón los platos. La zona y el concepto de bar está dirigido para determinado publico. Y a todos aquellas reseñas que no paran de ser haters: QUE NO HAY BRAVAS SIEMPRE EN CARTA!!! Por cierto recomendado Guía Michelin 2020 y 2021… por algo será…
Rosa Maria Mellado Uribes
+4
Comer de tapas de autor en pleno barrio de Sant Antoni, especialidad en vermouth y tapeo con calidad, buena bodega y tapas variadas. Servicio profesional. A tener en cuenta que las mesas son altas con taburetes, alguno más cómodo que otro.
Una muy buena experiencia. El sitio es muy acogedor, tipo bodega, y el dueño muy atento.
Todas las tapas están buenísimas, de primera calidad. Recomiendo la "piparritas", y bravas.
Ideal para ir a tomar una copa, para aperitivo, o para cenar.
Criterios :
- Ambiente, decoración: 1/1*
- Personal, servicio, trato: 1/1*
- Cocina 1: calidad productos: 1/1*
- Cocina 2: presentación, originalidad:1/1*
- Precio:1/1*
Un placer para los sentidos. Todo riquísimo. Los huevos impresionantes, las albóndigas increíbles y los canelones exquisitos. Los postres a la altura.
Uno de mis bares favoritos en Barcelona. Estupendo para tomar unas cañas y bravas a un precio razonable y muy simpáticos los camareros. Recomiendo los huevos de la abuela
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