Siempre todo delicioso. Se nota que lo hace con todo el cariño y amor del mundo. Sitio tranquilo sin pretensiones estéticas. Para comer y siempre bien . 👌
![4]( "Recensione")
Al atravesar la puerta es como salir de la ciudad.
Nada más entrar me llamó la atención la cocina abierta con las diferentes ollas al fuego y un olor a comida de la yaya que es tan difícil olvidar. Se respira tranquilidad y las prisas se quedan fuera.
La dos chicas súper atentas y simpáticas. Un trato muy familiar. Da gusto ser atendido con tanta naturalidad, amabilidad y cercanía.
La comida está rica, consta de 3 platos.
El día que fui el menú era una crema o sopa (o mezcla de las dos), un principal con ensalada, verduras, legumbres, cereal y a escoger entre albóndiga de tofu o empanada de espinacas. Y de postre compota de manzana o yogur de soja o mezcla de los dos.
En el principal tuvimos la mala suerte que la empanada estaba en el horno y nos dijeron que la traerían en 5min pero fueron unos 20 minutos después (hay que dejar las prisas en la puerta).
El menú son 18€. Creo que es algo caro para el menú en su conjunto. Aunque al ser un local tan pequeño con muy pocas mesas es posible que si fuera menos no saldría rentable.
Lugar entrañable que merece al menos una visita pese a que el calidad precio considero que es caro.
Joya del barrio. Toda la comida es exquisita y tiene ese sabor que cuesta encontrar cuando comes fuera de casa: casero y hecho con cariño. Cuando sales de allí te sientes bien porque te has alimentado y cuidado.
El local es pequeño y siempre preferimos reservar.
Ofrecen tres opciones diferentes según el apetito y el bolsillo. Opción completa es un entrante que suele ser sopa de miso o crema de verduras, el combinado del día (con legumbres, arroz integral, ensaladas y verduras cocidas, además de la preparación del día: pescado, proteína vegetal o unas empanadas de verduras tremendas!) Por último el postre, sencillo y con pocos ingredientes.
Si quieres una opción más económica se puede quitar el entrante y el postre, con el plato combinado ya has comido bien.
Lo único malo para nosotros por horario de trabajo es que no abre ni los fin de semana ni noches y lo podemos disfrutar muy pocas veces.
Sitio pequeño y acogedor, muy familiar. Comida macrobiótica buenisima, todo super sano! Nos ha encantado!
Hacía tiempo que queríamos ir y la verdad es que hemos comido genial, todo riquísimo y super casero. Volveremos seguro.
Todo estuvo muy rico!
El sabor de la comida súper natural, la preparación al momento, te hacen sentir como en casa.
No tenía ni idea de a lo que me estaba metiendo. Había visto el restaurante en El Barrio y me decidí a entrar. El lugar es acogedor y como de cuento. Las chicas muy amables. La comida no me pareció espectacular, pero hay que tener en cuenta la idea macrobiótica, que supongo que en ese aspecto estará genial.
Deliciosa comida casera, con opción vegana, en un lugar tranquilo y acogedor . Genial refugio para comer.
Es un lugar especial de cocina macrobiotica. El menú es el q es cada día. Buenas raciones,riquísimas en un lugar con pocas mesas,muy tranquilo y acogedor. Parece que estás comiendo en una casa particular, no en un restaurante.
Nos dejaron elegir entre crema de verduras d temporada o miso en el primero. Y en el segundo plato, podías elegir una combinacion con pescado ligero, rebozado o bien tofu rebozado dentro d un plato variado con trigo integral, verduras al vapor cocinadas en el punto exacto, brotes d varias lechugas con espolvoreado d semillas y lino,sésamo .Y de 1ero y de 2o probamos las 2opciones. Y d postre había pocas opciones todas caseras , comimos una coca con frutos secos y manzana.
Tambien entraba agua. Al final tomamos infusión d bastantes hierbas ,sin teína muy aromática. La infusión era a parte del menú.
Me encantó este restaurante!! La comida deliciosa, el servicio genial y el local muy acogedor. Te hacen sentir como en casa. Además, compre el libro de recetas escrito por Beatrui que es una auténtica maravilla. Siempre que esté por la zona iré a comer. Si te gusta la comida macrobiotica no dudes en ir porque te encantará!. 💚
Comida nutritiva y energetica... Trato humano y cercano.
Probamos el menú entre semana y nos gustó. El local es pequeño pero muy acogedor.
Genial. Muy pequenito con comida espectacular. Todo super sano que te deja contento. Recomendado.
Es una pequeña joya en el centro de Barcelona. Servicio de superpuesto, muy buena relación precio / calidad. Disfrutamos de una gran experiencia .
Restaurante macrobiótico de muy buena calidad. Comida muy buena. Las cocas de frutas y las de verduras me gustan mucho.
Un lugar entrañable. Pequeñito local pero su comida está hecha con un amor enorme; se nota en el sabor y en la calidez de las personas que trabajan en el restaurante. Su comida macrobiótica, super sana y gustosa. Las raciones un poco justas pero deliciosas. Ojo, sólo abren los mediodías!
Un menú de 15 euros perfecto macrobiótico. Con muy buen ambiente casero y agradable para comer sola o en compañía. Penita q sólo abran de lunes a viernes, pero entiendo q tienen q descansar ;-) Para mi, Todo un lujo de sitio!!!!
Es un lugar muy agradable donde el trato es muy amable y familiar. Platos muy saludables, hechos con mucho gusto. Una pequeña joya en el Guinardó.
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