Hace un par de semanas estuve mirando bodegas de platillos para nuestro fin de semana en Gràcia y no hemos podido salir más satisfechos. Nos ha encantado. Todo muy bueno y a precios asequibles. El trato de las camareras es excepcional, muchas gracias por todo. Ya lo he recomendado a todos mis amics :)
He tenido el placer de ir ya unas cuantas veces, y esta última he llevado a mi familia para que conocieran uno de mis sitios favoritos de Barcelona. Como podéis observar en algunas fotos, ya era tarde cuando nos acordamos de hacerlas porque el olor y la presentación de todo era para empezar a comer sin pensárselo!! Probamos de todo un poco y la única pega que podemos poner es que no nos cabía más comida! La bodega siempre tiene muy buen ambiente y se está muy agusto. Muchas gracias Lu y Eli, no sólo por un excelente servicio, sino por acogernos tan bien🩷
Fuimos a comer el establecimiento pequeño se aconseja reservar, nosotros pudimos comer en la barra sin reserva.
Buen ambiente de taberna antigua, pedimos varias tapas ..Bomba de Barcelona, croqueta,ensaladilla, tortilla de trufa,dos vermuts, dos cocacolas ,bocadillo de lomo con berenjenas..59,30 euros.
Camarera muy simpática,la ensaladilla subida algo de precio pero estaba muy buena, cuidado con el horario cierra cocina a las 16h.
Clásica bodega de barrio. Vermut bueno, aunque no excelente. Platos calientes que combinan con los clásicos fríos propios de cualquier bodega. Destacar el pintxo de salmón ahumado: sencillo, bueno y de precio acorde (para ser Barcelona)
Buen producto y un servicio impecable! Lo recomiendo para probar diferentes platos como el atún marinado o el entrecote
Fuimos un día que estaba bastante tranquilo, pero normalmente se recomienda reservar. Éramos dos y pedimos varias tapas, la verdad es que estaban muy ricas y nos parecieron una buena ración. Las albóndigas de sepia y la bombas de brandada, riquísimos! El trato fue muy amable y cercano. El sitio es pequeño pero esta muy acogedor.
Un encanto de Bodega 🤩 Comida sencilla pero de alta calidad de producto. La chicas que están al mando son divinas. Precios honestos. Vuelvo fija. Gràcia siempre tiene una sorpresa!!!
Bodega escondida en una de las calles de Gràcia. Personal muy amable y buena selección de montaditos, raciones y platillos. La tortilla trufada estaba riquísima. Tienen también una buena selección de vinos en copa, y la cerveza se sirve bien fría y con la correcta cantidad de espuma. Perfecto para picar algo de manera informal. Esperéis pagar unos 20-25 euros por persona, incluyendo bebidas.
El servicio muy amable. La comida estaba rica, la ración de jamón me pareció justa para el precio y para mi gusto, el bikini trufado es mejorable.
Me encanta este sitio! Es súper acogedor y tiene mucho encanto. Es una bodega antigua con mucho estilo y con platillos básicos pero muy buenos. Además, puedes entrar con tu mascota!! Recomiendo mucho este sitio!!
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