вот это стейк! вот это сервис! спасибо за ужин�
Pedimos 1/4 de lechazo para compartir y la cantidad era más que suficiente. La carne estaba muy bien hecha, muy melosa. Las patatas fritas nos sorprendieron. El servicio estaba pendiente de todo. Por poner un pero, el ambiente se notaba muy cargado.
He puesto un 5 a este restaurante porque el servicio es bueno, el local es grande, te permite reservar para grupos fácilmente, no escuchas a las mesas de al lado y la comida está muy rica.
El pan está riquísimo, te lo sirven caliente en una bolsa de papel.
Pedimos de entrantes una tabla de quesos, unas croquetas, verduras a la parrilla y la entrada castellana. Todo buenísimo.
De segundo para compartir el lechal y el cochinillo, también muy rico.
Por último, de postre pedimos la tarta de queso porque soy muy fan, pero lo realmente bueno es el milhojas de crema.
Comer o cenar en este restaurante emblemático de Barcelona, es todo un acierto para los amantes de la buena carne.
El cochinillo está increíble, aunque mi máxima recomendación es el Lagarto de cerdo ibérico a la brasa.
Pero en general cualquier tipo de plato o carne de su especialidad está buenísimo.
De postre, la tarta de queso exquisita (casera y se nota).
El restaurante es amplio y la disposición de las mesas muy acertada.
El personal muy profesional, en nuestro caso nos atendió muy bien Edgardo.
Restaurante grande decorado al estilo de las antiguas casas palaciegas de Castilla. Le falta mejorar un poco la ventilación, ya que el ambiente estaba lleno de humo.
Están especializados en carnes a la brasa, que cocinan en su propio horno a la vista de todos. Su mayor fuerte es el cordero y el cochinillo, les sale muy rico. Los choricitos están deliciosos y tiernos, el pan te lo sirven dentro de una bolsa de papel y creo que es el mejor que he probado en mi vida.
Las mollejas al ajillo llegaron algo frías y la textura no estaba lo suficientemente tierna. El revuelto de ajetes con jamón ibérico regulero, ese jamón no sabía a ibérico en absoluto. Las croquetas de jamón buenísimas, muy cremosas.
En los postres, la tarta de chocolate estaba sequísima, pero la tarta de queso y el hojaldre estaban bien.
Muy buena atención, personal amable, la comida llegó rápido.
Restaurante asador tradicional, decoración vintage, amplio y acogedor, personal siempre atento.
Un buen servicio y muy acogedor. Perfecto para ir en pareja o en grupo. La comida muy buena
Un lugar muy acogedor.
Aunque para un dia de la madre, con las salas llenas, hay un poco de caos.
Local grande y bonito. A la entrada tiene un bar a parte donde poder picar alguna cosa.
Hornos de leña para su plato estrella, el lechazo.
Te ponen una bolsa de pan calentito súper bueno. El cheesecake también estaba muy rico.
Todo perfecto por mi parte !!!! El camarero Dani super simpático,muy atento y servicial!!! Si os sirve él la mesa,habéis triunfado...!!!!
Uno de los clásicos de Barcelona, y tocaba comida de negocios, así que, para qué arriesgar? El servicio recibido juntito, al menos el camarero que nos atendió, para el nivel que quiere mostrar el establecimiento. El producto es de calidad. La presentación está cuidada. Optamos por entrantes para compartir, esparragos, verduras y patatas al horno. Todo realmente bueno. Y como platos principales, el lechazo (brutal) y las chuletillas. La relación calidad/precio de El Asador de Aranda es correcta. En resumen, una buena experiencia y un lugar a tener en cuenta, si quieres comer bien y quedar igualmente bien.
muy bien! siempre que vengo por eso las 5 ⭐ decoración rústica Castellana antigua, trató muy bueno y comida EXCELENTE.
Buena calidad/precio. Tienen un error, que es , cuando alguien hace en su mesa particular la carne, NO TIENEN ESTRACTORES DE HUMO, y se LLENA EL HABITÁCULO DE HUMO.
Restaurante emblematico de Barcelona por el que no puedes pasar de largo. Esta vez solo paramos a tomar un refrigerio que nos sirvieron acompañado de una tapita de olivas y claro esta, no pudimos dejar de pedir unas croquetas de jamon a modo de picoteo. Servicio impecable y productos de calidad. A pesar de ser un punto elevado de precio vale la pena por el servicio recibido. Posibilidad de aparcamiento tanto en zona azul como en parking privado.
Marco Antonio Rodrigo Martinez
+5
Como buen Castellano en Barcelona, llevaba tiempo anhelando degustar un buen lechazo! Encontre el Asador de Aranda por casualidad, buscando restaurantes de gastronomia castellana.
La sorpresa fue maxima con la calidad del producto, la decoracion del restaurante y la amabilidad del personal.
Obviamente sin lugar a dudas, repetiré.
Restaurante con mucha solera y bien merecida.
De gran calidez y servicio, se agradecen las atenciones tales como las copitas de cava al sentarnos, las olivas, el petit four con el café , muy rico..
Sobre la comida; no sabría decir si nos gustó más el Lechazo o el Cochinillo, ambos cocinados a la perfección.
Excelente calidad/precio.
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