Muy recomendable, pedimos varios platos a compartir (eran bastante grandes) y luego unos postres, todo buenísimo. El trato al cliente muy bueno también, una camarera me vió sin jabón y enseguida vino corriendo a cambiarlo, a parte todo muy limpio y bonito!!
Todo bastante rico, pero la ensalada de burrata dejo mucho que desear.
El sitio bastante bien, pero hacia frio en la terraza exterior cerrada.
Francisco Carrillo Martín
+5
Celebramos un cumpleaños (16 personas)y no se pueden decir cosas malas...trato espectacular de todo el equipo del restaurante desde el dueño Christopher ,hasta su equipo(camareros,cocineros..) liderado por Rodrigo(un auténtico profesional),comida exquisita y muchísima cantidad además de calidad,local precioso y muy bien acondicionado.
Volveremos sin lugar a dudas...hacia muchísimo tiempo que no iba a un local a comer y que saliera todo de 10.
Gracias por todo al equipo de LA PECORA,por hacer que nos sintieramos como en casa.
Fuimos con amigos, cuatro parejas con cuatro niños.
La comida impresionante, la presentación inmejorable y el sabor de otro planeta.
Caty nos atendió y fue espectacular.
¡Volveremos!
La carta no es muy extensa, pero con todo lo que tiene, basta. La comida riquísima. Platos clásicos y modernos. Todo perfecto
Fuimos a comer el Domingo con amigos. No conocía el sitio y nos encantó.
Pedimos varios platos para compartir, y estaba todo buenísimo. Lo que más me gustó fue el wok de arroz con pluma ibérica, espectacular, la ensalada de burrata y los cachopitos también buenísimos.
Comimos en la terraza, muy agradable y la camarera muy atenta.
Repetiremos seguro, buen descubrimiento.
Restaurante muy agradable, que se llena los findes a la hora del vermut y para cenar.
Entre semana tienen menú del día que está muy bien.
La carta es corta, pero sorprende con sabores de aquí y de allá, cambiando cada temporada, lo que se agradece porque nunca te aburres.
La burguer brutal, las gyozas buenísimas (relleno es soooolo carne), la ensaladilla con atún marinado sorprende, las croquetas pequeñas pero ricas, los langostinos en tempura de vicio, las alcachofas de lujo.
Una cosa a mejorar en mi opinión el arroz con pluma, está bueno pero es demasiado grasiento.
En la terraza cubierta se puede estar con el perro (educado), lo cual es un plus, tanto en verano como en invierno.
El personal es agradable, la comida en general está rica pero para nuestro gusto la cantidad escasea. Con la bebida te ponen una tapa. Pedimos el bocadillo de calamares en pan cristal que lleva poca cantidad… más pan que otra cosa, el lomo de vaca estaba rico aunque nos llegó más hecho de lo que habíamos pedido y el punto de maduración para nuestro gusto era un poco alto. De postre la torrija con helado, todo rico, aunque en el centro del helado había cristales de hielo y en la torrija echamos en falta más leche, estaba muy poco “mojada”. Tendremos que probar otras cosas de la carta.
Buen sitio para pasar un rato tranquilo y con muy buenos platos, todo estaba muy bueno, recomiendo Saam de langostino en tempura, Ensaladilla rusa, 😉
Espectacular, los sabores, la presentación de los platos, los camareros, la rápidez, sales con la sensación plena de haber ido a un buen restaurante. Recomiendo 100 x 100.
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