Un buen sitio para cenar, la carta es variada y por suerte no todos los platos están fuertes, en la carta indican lo que es más picante. Sí que vimos que la bebida, en concreto el agua es un poco cara pero bueno, la comida está riquísima. La comida no tardó en salir y la camarera muy atenta. Fuimos cuatro personas y pedimos unos nachos y dos burritos (de los grandes), teníamos ganas de probar la tarta "muerte por chocolate" pero nos comentaron que los postres van alternándose por semanas y casualmente no tenían. Aún así, cenamos muy bien. ¡Volveremos!
Un local original, con decoración y ambientación mejicana. Un lugar confortable, con bastante separación entre las mesas, cosa muy positiva.
El trato de los camareros es muy bueno, la comida está muy bien en relación calidad/precio.
Vinimos por casualidad, y ahora repetimos por gusto.
Esperamos poder probar aún más cosas que nos puedan transportar un poquito a esta maravillosa cultura.
Estuvimos cenando el pasado viernes y la verdad que la experiencia fue de 10.
Para empezar el local en el que se encuentra es no solo acogedor si no también agradable a la vista.
Por su parte el camarero fue super agradable y nos atendió bastante rápido, al haber leído algunas reseñas pensabamos que tardarían en atendernos y servirnos, pero todo lo contrario, nos atendieeon bien y rápido y tiene más valor teniendo en cuenta que había más mesas y una de ellas con más de 8 comensales que aún no les habían servido cuando llegamos, y aún así fue todo bastante rápido. En lo que si tardaron un poquito fue en darnos mesa, pero al ir son reserva y ser un lugar bastante concurrido y con reservas pues no es de sorprender.
Y por último la comida nos encantó.
Dejo foto y precios de lo que comimos y una foto de una de las paredes del local. Si volvemos a Ciudad Real repetiremos sin duda.
La comida está muy buena y los precios no son abusivos, además se puede elegir el tamaño de algunos entrantes y o de los burritos y eso viene muy bien para poder probar más cosas. El servicio bueno,con música mexicana, lo peor es la ubicación, está algo retirado.
Nos encantó. Todo buenísimo. Buen trato. Los tiempos de espera para la comida muy bien. Está en una zona a la que es fácil acceder y no está escondido. Importante para mí punto de vista que si llevas niños no pueden estar correteando, pone unos carteles que lo indica. Puede que esto a gente le moleste pero yo personalmente lo veo bien por lo que puedes comer tranquilo y sin niños chillando y corriendo por el garito. Estamos deseando de tener una escusa de ir a ciudad real para volver allí a cenar
Si tengo que recomendar un sitio para comer/cenar siempre es mi primera opción. Relación calidad/precio genial. La calidad de la comida es genial con unos sabores únicos con una comida perfectamente elaborada. No hay mes que nos resistamos a repetir.
María Luisa Blanco Muñoz
+5
Buah...espectacular,aunque hay q esperar un pelín por la comida,merece la pena porque está hecha in situ...buenísima y los camareros un encanto
Nos ha encantado la comida espectacular, las patatas Lupita están súper ricas y el chico que nos ha atendido super majo y se sabía todo y el local muy bien repetimos
Después de leer varias reseñas negativas de este sitio he podido comprobar que hay gente muy resentida con la vida, en general, y que creo que el problema es que no saben educar a sus hijos y creerán que los demás deben aguantar su mala compostura en locales como este. Un placer la atención y la comida, la verdad. Hemos pedido nachos mixtecos, enchiladas tricolor (si TE GUSTA el picante no las pidas, vas a llorar...), fajitas de pollo y de postre, surtido de postres (coulant de queso, de turrón y "palitos de la abuela" rellenos de chocolate fundido). Qué mal lo he pasado con las enchiladas, pero las pediría de nuevo, merece la pena el mal rato. Las fajitas de pollo deliciosas también. Los nachos muy muy ricos (la ración entera entra sin problema, la de la foto es media). Y los postres... Qué ricos, de verdad, bocaditos de cielo. Volveremos por aquí, seguro 100%, e insisto, sobre el personal, pega ninguna, más bien gente "con el poder de valorar" que quiere hacer daño a la reputación de un local que sirve comida que realmente está muy buena, por el simple hecho (me juego el cuello) de no saber educar a sus hijos a mantener la compostura fuera de su casa.
El pasado sábado fui con mi pareja a cenar allí. Es un sitio con una temática bastante llamativa e inversiva que te acompaña a disfrutar de la comida.
La comida está deliciosa, pedimos dos burritos medianos, uno mexicano y otro sólo pollo, pero ambos estaban bastante rellenos e incluso podría decir que nos dejaron llenos. También probamos los palitos de pollo con una salsa bastante rica y algo picante.
El camarero que nos atendió fue bastante agradable con nosotros, algo a agradecer. En general me quedé con un buen sabor de boca.
Como consejo llamaría para reservar mesa en fin de semana y así tener hueco en la zona de comedor. Y sos asuntos s mejorar del local deberían ser: la insonorización del lugar pues resultaba algo incómodo mantener una conversación con todo el ruido que había, y el incorporar a una persona más como camarero porque el pobre iba agobiado atendiendo tantas mesas.
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