Restaurante con vistas preciosas a la plaza de la Iglesia. Disponen de una terraza panorámica. La comida está muy rica y sus cafés buenísimos. El personal es muy amable. Muy recomendable 👍
Elvira Gonzalez Holgado
+5
Bar y restaurante típico español aunque está en un entorno que podría haberse contagiado del exceso de turistas, menos mal.
La plaza es espectacular por el entorno y la maravillosa luz.
Merece la pena sentarse en la terraza frente a la Parroquia de Nuestra Señora del Consuelo.
Camareros profesionales y amables.
Boquerones en vinagre como Dios manda y en la terraza te ponen también cañitas, olé!
Establecimiento muy recomendable. En el centro de Altea, en la Plaza de la iglesia, enfrente de Nuestra Señora del Consuelo . Buenas raciones y trato excelente. Buen precio. Las llesquetas muy buenas. Volvería 100%. Si pasas por Altea no dudes en comer aquí.
No teníamos reserva y por suerte al preguntar nos ofrecieron súper amables una mesa en ático.
No esperábamos la excelente atención de los dos camareros de esta zona.
Comida buena y hecha a la parrilla en el momento.
OJO: La carta de terraza de plaza es sin tinta a la de terraza superior.
Comensales: 2 adultos + 2 niños.
Comanda:
Ensalada de queso azul con manzana y nueces.
Pechuga de Pollo parrilla
Entrecot trinchado a la parrilla con guarnición de pimientos, cebolla y patatas.
No probamos las Llesquetas, que tenían muy buena pinta…..
La verdad al hacerlo en la parrilla al momento queda muy bueno.
Nos ofrecieron chupito de invitación.
Lugar no esperábamos y encontramos gratamente.
Recomendable.
Alexandra Vanessa Peña Viloria
+4
Comimos muy poco. Compartimos una llesqueta estuvo buena. Tomamos agua de valencia! Me pareció muy rica. Lo que más me gusto fue la vista tan Bella que tiene esta terraza. Recomendada. Para tapear y tomar algo al atardecer.
Todo muy bien.
Las llesquetas y el entrecot estaban buenísimos y la relación calidad precio es genial, es todo bastante económico.
Tienen 3 o 4 plantas con muchísimo espacio pero tienen diferentes cartas para cada planta.
Hay una terraza con vistas panorámicas y merece la pena cenar allí.
El servicio ofrecido por los camareros ha sido lo mejor, super atentos y serviciales, además de simpáticos.
Hemos ido a cenar y la verdad que no tenemos ningún "pero". El camarero nos ha aconsejado en todo momento (súper bien) y nos ha encantado lo que hemos cenado.
El carpaccio de pato estaba espectacular, la llesqueta de manzana y miel.. aún la estoy saboreando (un espectáculo) y la tarta de queso, tengo que decir que no es la mejor que he probado, pero es casera y también estaba muy buena.
Sinceramente, tanto la ubicación, el trato, como la comida/precio, por la zona es de lo más aconsejable.
Un 10 sin duda.
Me encantó cenar el fin de semana, junto a mi novio, en este lugar precioso, con una vista increíble, sin duda alguna, un lugar muy agradable, un reconocimiento para la camarera Mónica y Miguel, que son increíbles!!! Atención 💯 y comida deliciosas!!! Amé las llesquetas manzana y miel 😍
Volveremos!!! Amé Altea y su casco historico.❤️
Perfecto lugar para cenar si visitas Altea. Subimos a cenar a la terraza panorámica, y muy bien, suficiente espacio entre mesas. Personal muy atento y cualificado. Por un lado ves la montaña, y por otro el mar, lo que hace impresionante el sitio. Sin lugar a dudas, volveremos a repetir. Lo recomiendo 100%
Local céntrico, frente a la iglesia de Altea. Pedimos unas tapas y unas bebidas, en la terraza exterior. El servicio, un poco lento, hay que reconocer que la terraza estaba a tope. Las bravas, muy buenas, aunque el picante... ¡fuerte! El camarero, atento, aunque desbordado. A pesar de eso, volvería.
Muy buen sitio para disfrutar de la terraza. La comida no es muy variada pero está bien y a muy muy buen precio. Cenamos por 30€ dos personas! Y la camarera muy buena anfitriona
Ubicación privilegiada. El personal es amable y atento. La terraza es fantástica, pero lógicamente hay que subir escaleras. Los precios dado la ubicación son correctos. Las tapas están buenas. En el casco antiguo no se puede aparcar ni circular con coche. Conveniente reservar antes. Lo recomiendo.
Anoche cenamos en el Racó para celebrar el cumpleaños de mi madre. Había hasta luna llena!!! Lo pasamos fenomenal, estaba todo muy rico (la ensalada de aguacate, el carpaccio de bacalao y la llesqueta cuatro quesos) y el Equipo Maravilla (Mónica, Marta y Miguel Ángel) fueron encantadores con nosotros. Esperamos volver cuanto antes.
Fuimos recomendados por un amigo y acertó al 200% la comida estaba buenísima, la atención de la camarera (una pena no pedirle el nombre) y el precio por la calidad no tiene comparación. Si vuelvo a Altea repetiré sin duda. La camarera fue muy simpática, nos ayudó en alguna duda y acertó completamente al recomendarnos los platos. Fuimos 3 chicas. 2 botellas de vino, un entrante y 3 primeros por 75€ cuando en otros sitios nos habria salido a más de 100€ seguro. Y además las vistas desde la terraza de arriba donde estuvimos eran especiales desde el atardecer hasta cuándo es de noche y se encienden las luces.
Cada verano vamos al Racó para cenar las famosas llesquetas y disfrutar de la terraza con hermosas vistas. La llesqueta de manzana es espectacular! Recomiendo también la tarta de turrón de postre. La camarera Monica, muy maja y atenta. Un diez!
Llevo años visitado Altea y ha sido el descubrimiento del verano. Hemos cenado en la terraza dos veces con visitas y ha sido todo un éxito. El atardecer ahí arriba es un regalo a la vista. Eso sí, fuimos pronto y pudimos sentarnos al lado de la barandilla.
Las llesquetas, sobre todo la de manzana y miel, están buenísimas.
Y además, el trato de todo el equipo ha sido excepcional. Mónica ha sido la camarera #1 este año, las dos veces que cenamos y la vez para conocer la terraza y reservar, nos hizo sentir como si fuese un familiar más!
Fuimos sin reserva y nos ofrecieron una mesita en la terraza que estaba en lo alto del edificio sin el agobio que suele haber en estas épocas de agosto en la calle y las terrazas
Pedimos para compartir carpaccio de pato con parmesano buenisimo y de segundo también para compartir una llesqueta, que para los que no saben que es, es parecido a una pizza pero en vez de masa de pizza con pan estilo tosta muy rica también por no decir espectacular
El camarero era súper amable y atento y nos recomendó de postre una tarta de turrón casera que era un auténtico delicia
Se me olvidó foto de la cuenta pero fueron 39 euros con una copa de vino, agua y un refresco
Julio Arranz Florencio
+5
Unas vistas impresionantes, el servicio por parte de Monica y Miguel, exquisito, mejor imposible, si hay un sitio que repetiré será este, y no dudéis en subir a la terraza, se hacen unas fotos espectaculares
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