Cenamos en el reservado porque el aforo del comedor principal estaba completo. El reservado se encuentra justo enfrente y es un rinconcito con una decoración cuidada con aire romántico.
El personal muy amable y atento.
La comida rica y sabrosa a un precio asequible.
Espectaculares las croquetas de b
Buena comida, agradable decoración, buen ambiente y mucha amabilidad. Recomendamos los cardos y el jabalí, aunque todo estaba rico. Aconsejan bien. Raciones de buen tamaño para el precio. Nos quedamos con ganas de probar más platos de la carta, ¡habrá que volver!
Buen restaurante en Albarracín. En modo resumen:
- servicio/atención: estupendo
- restaurante: bonito
- comida: bastante bien
De comer pedimos:
- croquetas de jamón de Teruel : 7,5/10
- croquetas de boletus y trufa: 7/10
- milhojas de foie: 8/10
- rabo de toro: 9,5/10
- solomillo en salsa de trufa:
Reservamos porque al ser sábado nos dijeron que se llenaba bastante.
Lugar muy agradable todo súper bonito y cuidado.
Recomendamos los canelones, pero en general todo estaba buenísimo.
Volveremos !!
Muy buen sitio. Buena variedad de platos, buen trato, buen ambiente. Me encantó a mí y a mis amigos. Se lo recomiendo para una cena de calidad y comida típica.
Fuimos a comer con tres niños y estuvo genial, la comida, el trato fue espectacular, si vuelvo por allí sin duda volveré. Las migas mi plato favorito. Estaba a tope y aún así nos hicieron un hueco.
Si no queréis fallar a la hora de comer venir a este restaurante. Es súper acogedor, muy bien ambientado( no destripo como es) y la atención y la comida es de 10. Por recomendación pedimos variedad de platos al centro para poder probar todo lo posible, y todo impresionante, sobre todo el solomillo d
Buen sitio, muy recomendable. Local pequeño y coqueto con varias zonas. La atención del personal fue amable y correcta. Los platos salieron con bastante celeridad a pesar de estar completo. Todos los platos estuvieron realmente buenos: alcachofas, revuelto de setas, croquetas, cardos, solomillo...
LUGAR ACOGEDOR CON BUENA COMIDA.
Estaban todos los restaurantes cercanos llenos, preguntamos por casualidad y tenían mesa en un salón superior pero al ir con un carrito de bebé... nos abrieron un pequeño saloncito justo en frente, casi para nosotros.
Buen servicio y agradables con platos elaborado
Hemos comido paletilla de cabrito y bacalao con pisto, dos copas de vino, un postre para compartir, dos raciones de pan y dos cafés y hemos salido a 30 euros por persona. Platos abundantes y muy buen servicio
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